Saludos amigas y amigos.
Entre las singularidades de la Ciudad de Martos y su Término Municipal
siempre me ha llamado la atención el nombre de una de sus pedanías, a la
que estoy vinculado territorial y familiarmente.
Monte Lope Álvarez siempre fue para mi un nombre curioso, pues no son
muy frecuentes los nombres de poblaciones tan largos y compuestos,
además de tener un nombre que cualquiera diría que es el de una persona.
Esta pequeña población se encuentra próxima a la provincia de Córdoba.
Vive del olivar que la rodea en su totalidad y en torno a ella, abundan
las aldeas como Los Cortijuelos, Las Aceras, Mingo Yustre, El Coracho,
Casa Sola y muchas más.
También goza de recursos naturales como la Laguna de las Aceras, el
Pinar de Saler, el Olivo Centenario de la Candonga o la Cantera de yeso
de las Aceras y además es una zona rica en yacimientos arqueológicos,
como bien se demostró recientemente con el hallazgo de un horno romano y
un “polígono industrial” alfarero en las obras de la carretera hacia
Martos.
Unos vestigios que nos hablan de la constante ocupación histórica de
esta zona de Martos, llena de historia, tanta como su nombre.
Para entender de dónde procede el nombre de este pueblo, debemos viajar
al medievo, cuando existían en la zona varias pequeñas poblaciones
fortificadas o alquerías árabes, que pasaron al control de la Orden de
Calatrava con la entrega de la ciudad misma, en 1225, pocos años después
de la conquista cristiana.
Los monjes calatravos nombraron gobernador-alcaide o tenente a Don
Alvar Pérez De Castro, casado en segundas nupcias con Doña Irene Mencía
de Haro, hija de Lope Díaz de Haro, señor de Vizcaya.
Y a su primer hijo lo llamaron Lope en honor a su abuelo y al poco le
entregaron el lugar de “El Monte” que desde entonces pasó a llamarse el
Monte de Lope de Alvar(ez), pasando tal lugar y su denominación hasta la
actualidad.
Otras fuentes afirman, que el origen del nombre de esta pedanía se debe a que tras la Reconquista, el dueño de este Monte, un fraile llamado Fray Lópe Álvarez, comendador de Vallaga y de Benavente del
Rabal, legó su nombre al lugar.
Por tanto, no se conoce con exactitud el origen de tan singular nombre, pero si que podemos ubicarlo, en los tiempos de la Edad Media, reconociendo así, la tremenda historia que esta pequeña poblacíon tiene.
Pero llegados a este punto surge una duda...como descendiente de
habitantes de la zona, yo desde pequeño me crié escuchando a mis
familiares referirse al Monte con el nombre de “Las Máquinas”...¿de
dónde vendrá este calificativo popular?
Si no tengo mal entendido, el apodo de ‘Las Máquinas’ viene de la época de la industrialización del olivar. Con la implantación de las almazaras en el pueblo y la llegada de maquinaria para la molturación del aceite, los vecinos de las cortijadas cercanas empezaron a llamar así al núcleo en el que se ubicaban las fábricas. Eso, al menos, me cuentan a mi mis abuelos. Bonito post, un saludo.
ResponderEliminarMuchísimas gracias por tu comentario y por visitarme! Es un honor!
EliminarAlgo de esto había escuchado ya, pero siempre es un placer que mis paisanos se impliquen en nuestra historia!
Un saludo y de nuevo, gracias!
Así es Ana
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
EliminarEl nombre viene de la introducción de máquinas para modernizar el proceso de la obtención del aceite,y ese hecho produjo la construcción de casas alrededor de la fábrica,dando lugar a la formación del pueblo.Un saludo Miguel Caballero
ResponderEliminarMuchísimas gracias por tu comentario y por tu visita! Entre todos podemos hacer muy grande nuestra historia!
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