martes, 28 de abril de 2015

El Castillo-Convento Calatravo de la Peña de Martos. Una Joya que Salvar II Parte

Hace años, en algunas páginas web de Internet y sobre todo en algunos grupos de redes sociales, comenzó a fraguar una iniciativa para reivindicar la consolidación y restauración del Castillo de la Peña de Martos.

Un tema este, que trae cola desde hace décadas, por no decir siglos, pues ya existen documentos muy antiguos que hablan de la necesidad de conservar la fortaleza que corona la Peña de Martos

Son muchos los escritos, los artículos, los libros donde de un modo u otro se ha hablado de este Castillo y hace dos años quise aportar mi granito de arena apoyando la salvación de este castillo, hoy arruinado para desgracia de nuestro pueblo y por esto escribí un artículo que a día de hoy no deja de recibir visitas, que ha sido leído 7.679 veces y desde lugares tan lejanos como Alemania, EE.UU, Rusia, Kazajistán, Azerbaijan, Francia, Portugal o Italia.


Hoy ese artículo sigue siendo de los más leídos de mi blog. 

Y quisiera en este momento aportar una segunda parte al mismo. Primero dando todo mi apoyo una vez más, para que el Castillo de la Peña de Martos, sea SALVADO de la destrucción a la que está siendo arrastrado si no se le pone remedio y haciéndolo además, ahora que surge un movimiento ciudadano como es SALVEMOS EL CASTILLO DE LA PEÑA, que en Facebook ya tiene miles de seguidores/as.


Y lo hago, confesando que ha sido y es un sueño para mí desde siempre, subir al castillo de la Peña y encontrarme algo más que ruinas, basuras y dejadez como tenemos ahora. Que nada me gustaría más que llegar un día a la cima de la Peña y encontrar nuestro castillo al menos conservado.

Y ya se sabe, los sueños solo mueren si muere el soñador.

Otros lo están haciendo. Alcalá la Real, Moclín, Alcaudete, Baena, Torredonjimeno, Villardompardo y tantos otros ya han arreglado o lo están haciendo sus castillos y como podéis leer, algunos son pueblos que no llegan ni a los 5.000 habitantes. ¿ Si estos pueblos lo están haciendo, no puede hacerlo una ciudad industriosa como Martos ?

Y alguno dirá que, claro, arreglar el Castillo ¿Para qué? 

Y yo le diría que para mil y una cosas, que podrían traer mucho bueno y poco malo a nuestra ciudad.


INVERSIÓN. Son muchas las entidades publicás y privadas que están apoyando la conservación de las fortalezas como la de nuestro castillo, ya que las obras de restauración dan trabajo (y mucho) y cuando posteriormente, las obras han concluido atraen...


TURISMO Ese invento llamado turismo, que en Martos parece que no queremos conocer, y que sin embargo es la Primera Industria del Estado, nada más y nada menos.

Sirva como ejemplo el caso de Alcalá la Real y las más de 33.000 visitas que el castillo de la Mota recibió en 2014

Ya sé que muchos dirán que es mal momento para este tipo de obras...


¿ MAL MOMENTO? Y pienso: o en la mayoría de los pueblos que rodean a la Ciudad de la Peña son unos garrulos que no saben lo que hacen y nosotros somos los listos...o en la mayoría de los lugares que rodean nuestra ciudad están invirtiendo en la recuperación del patrimonio por algo. Quizás porque el patrimonio y como máximo exponente nuestro castillo....


ES NUESTRO, que no es invertir en una empresa y/o multinacional extranjera que hoy está aquí y mañana no, porque así lo ordenan los cánones del capitalismo (ELDON NO SE CIERRA, quizás alguno recuerde ese grito) no...que es invertir en lo nuestro. ¿De quién son si no, nuestros olivos, nuestro aceite, nuestra historia y patrimonio? 

Sé bien que son muchos los voceros que están en desacuerdo con SALVAR EL CASTILLO y entre ellos el primero es nuestro Ayuntamiento que estuvo a punto de declarar el Castillo de la Peña en Estado de Ruina y no lo hizo porque el hacerlo, les obligaba a intervenir en el mismo, pero ojo. SIEMPRE es un buen momento para invertir en patrimonio.


Es más, EL PRECIO DE HACER ALGO, SIEMPRE ES INFERIOR AL DE NO HACER NADA.

Si nos quedamos esperando a que sea "un buen momento" llegará el día que no quede nada de nuestro pueblo, más que un solar.


Y por supuesto. Sé muy bien cuál es la situación en la que estamos viviendo y que económicamente estamos pasando por estrechuras económicas, PERO nadie está pidiendo que el castillo esté arreglado, hoy, ya, inmediato.

Estamos diciendo que SALVEMOS EL CASTILLO. Que no se caiga.


¿No hay dinero? Hagamos un estúpido cálculo. Pidámosle a las administraciones, a todas, local, provincial, regional, nacional, etc que se comprometan a la locura de...poner una piedra diaria en su sitio en nuestro castillo...¿Qué precio tendría recolocar una piedra al día?...mísero...Y al cabo de 4 años tendríamos 1460 piedras recolocadas o lo que es lo mismo...un cubo de muralla de la peña restaurado...

Todo es cuestión de compromiso...el Castillo de la Mota no se ha restaurado en dos días...hace más de 4 décadas que se está trabajando en él y lo que quede...el Castillo de Torredonjimeno lleva años siendo restaurado y ahora comienza a verse y a sacarse provecho del mismo...y con el Castillo de Calatrava la Nueva, igual...


¿INACCESIBLE? Siempre sale el mismo tema, que el Castillo de la Peña de Martos es imposible de acceder. ¿Acaso lo construirían los extraterrestres como las Pirámides de Egipto? 

Pensemos: La Peña de Martos tiene 1003 metros de altura sobre el mar, pero, nuestra Plaza de la Constitución ya se encuentra por encima de los 700 metros de altura y la explanada de la Ermita de la Virgen de la Victoria, donde se realiza la romería, está mucho más alta que nuestra plaza...y encima tenemos un carril que asciende en parte por las laderas de la Peña. Por tanto, ¿de qué desnivel estamos hablando? ¿200 metros de desnivel? Muchos menos sin duda, y aunque así fuera, ¿cuántos edificios se están construyendo en la actualidad mucho más altos, con la ayuda de ese invento llamado grúa? 

Sin duda, con un par de grúas se solucionaba el subir materiales a la peña, pero ATENCIÓN, el principal material para restaurar nuestro castillo, la piedra, no haría falta subirlo siquiera...está allí, allí arriba, por todas partes diseminada o enterrada en el suelo del castillo...¿inaccesible dices?

Yo siempre recomiendo conocer el Castillo de Tíscar en Quesada, que hoy está reconstruido y que tiene una escalera metálica para subir hasta él, ya que este castillo sí que era inaccesible o el Castillo de Albanchez, con su kilómetro de sendero con más de trescientos escalones que nos llevan hasta él...eso sí que es inaccesible...

Queremos que nuestro castillo NO SE CAIGA, que al menos se conserve como lo hemos conocido y el gran día que eso se consiga, tendremos muchísimo hecho. 


Y entonces quizá podremos soñar o no soñar, recuperar la historia de nuestro castillo, excavar sus secretos....son muchas las excavaciones arqueológicas que se están llevando a cabo en nuestra provincia y algunas están haciendo muy famosas a sus ciudades (como Castulo en Linares, aparecido en revistas de historia, arqueología de medio mundo) y dándoles muchas alegrías, ya que en numerosas ocasiones los excavadores son voluntarios y en otras...INCLUSO PAGAN POR EXCAVAR  IN SITU!!

Es un hecho, que en nuestro pueblo no queremos ver: "La arqueología es un filón de oro para el turismo" (Diario Jaén) o "La cultura da 5 veces mas trabajo que las telecomunicaciones y la automoción" (El País).


Más de 2000 años de historia se concentran en la cima de la Peña....¿Vamos a dejarlos morir en el olvido?
¿No tienes tú, amigo o amiga lector, curiosidad en saber qué esconde nuestro castillo, que fue uno de los más importantes de su época?

¿Una causa perdida? Una causa jamas estará perdida, mientras quede una persona en pie luchando por ella.

                                SALVEMOS EL CASTILLO DE LA PEÑA DE MARTOS

Y para apoyar todo lo dicho, hoy os invito a un paseo por el Castillo de la Peña de Martos, para conocer su historia...la gran desconocida para muchos.

El Principio:

Pocos saben que nuestra Peña, el símbolo de nuestra ciudad, se formó en el fondo del Océano Prehistórico Tethis, en un tiempo en el que nuestro planeta aún estaba formándose y los continentes estaban en plena deriva. La Peña de Martos se formó hace unos 145-140 millones de años, en un tiempo en el que Europa, era un conjunto de islas con una climatología parecida al del actual Caribe.


Pero además nuestra Peña, guarda una particularidad. No se formó aquí, tal y como la conocemos a día de hoy. Dicen los geólogos, que con toda probabilidad, esta montaña se formó en el territorio que hoy se encuentra en la frontera de Martos y Alcaudete, en las Sierras de Ahillos y Caracolera y que los potentes movimientos sísmicos y las corrientes marinas, fracturaron la primigenia Peña, hace unos 139 mill. años y fue arrastrada durante 7 millones de años, hasta quedar enclavada tal y como la conocemos hoy día.

Es por eso que en nuestro término municipal, abundan los fósiles de todo tipo de animales prehistóricos e incluso "playas fósiles" en lo que antaño fue el Cerro de la Tiza y su cantera de tiza.

Es la Peña por tanto, un Olistolito. Un bloque de roca desgajado del sustrato y desplazado por una pendiente submarina. De hecho, nuestra Peña, es el Olistolito más grande de toda Andalucía, lo que en otros lugares, ya habría merecido como mínimo...la declaración de Monumento Natural.

Llama la atención, ese origen de la Peña, ya que las primeras crónicas humanas nos cuentan que la Peña de Martos fue Fundada por Hércules, siendo la Tercera Columna de Hércules tras Ceuta y Gibraltar.


En torno a nuestra Peña, la Peña de Hércules comenzaron a establecerse los seres humanos hace miles de años, aunque no es hasta el siglo V antes de Cristo cuando empieza a crecer un pequeño asentamiento, en torno a la Peña, que ya por entonces era lugar sagrado dedicado al culto de Hércules ella misma y que tenía además numerosos lugares de adoración, como si fuera un enorme Menhir.



Quizás uno de ellos se encuentre en el llamado Peñón Coció. Una curiosa formación rocosa moldeada por las fuerzas de la naturaleza y que guarda un pequeño secreto sobre ella.


Dicha roca, forma una pequeña repisa en la ladera de la peña y presenta una serie de círculos esculpidos en la roca, que muchos no dudan en señalar que se tratan de Petroglifos y que serían las primeras señales de la vida  en nuestra localidad y de asentamientos en la peña.




Así  fue formándose la Tukke ibérica, constituida por dos núcleos de población, uno en la cima de la Peña y otro en una de las laderas, donde hoy se encuentra la Plaza de la Constitución.

En ambos lugares se irían formando sendos oppidum o poblados fortificados. Famosos serían ya estos recintos defensivos ya que serían partícipes de las hazañas de Viriato en las guerras contra el invasor romano.

La Hispania Romana y la Mons Tuccitanorum

Con la llegada de los romanos la ciudad llegó a convertirse en una de las ciudades más importantes de la Bética, fundándose la Colonia Augusta Gemella Tuccitana habitada por veteranos de las Guerras Cántabras.

Conforme la Ciudad Baja fue creciendo y ampliándose, creció también la ciudadela de la Peña, reforzándose sus defensas al tiempo que aumentaba el misticismo de la montaña misma, al ser consagrada al dios Marte y ocupar el culto al mismo, los antiguos templos dedicados a Hércules.


La peña, el Mons Tuccitanorum romano, fue sagrada también para los romanos que dejaron buena huella en la misma, como es el supuesto reloj de sol que se encuentra esculpido en la roca al inicio del actual Paseo del Calvario.


Pero no es solo este, el único vestigio romano que encontramos en la Peña de Marte. En el solar, de una antigua cantera que otrora se excavó en la peña, podemos hallar sillares romanos, antiguos muros de argamasa e incluso conducciones de agua construidas como se hacían en la antigua Roma, fundiendo dos tejas y encajándolas realizando así canalizaciones.




Tucci Cristiana Visigoda, Sede Episcopal.

Los visigodos trajeron a Martos un aumento de la importancia de la propia ciudad, con el arraigo del cristianismo, que en Tucci fue muy fuerte y la conversión en Sede Episcopal de la Villa, llegando a tener su propia Ceca o Moneda y su propio obispo.


Este hecho, en un tiempo en el que la monarquía era electa y los propios obispos tenían importante voz y voto para la elección del susodicho monarca, remarca aún la relevancia de esta ciudad.

Fueron los visigodos los que construyeron en el Castillo de la Peña un templo, que con los avatares a los que después se enfrentó el mismo, fue sufriendo numerosas modificaciones, al tiempo que iba creciendo.

Quizás parte de ese templo se reutilizara siglos más tarde, tras la Reconquista y queden muestra de ello en los muros del actual castillo.


El Hinss-Tuss árabe.


En el año 711 guerreros musulmanes al mando del caudillo Tariq Ibn Ziyad llegan a la península y se enfrentan al ejército visigodo en el Guadalete, donde sería derrotado. En ese momento comienza la presencia musulmana en España.


Nuevas murallas, torres y puertas se alzan en Martos con los nuevos invasores y en la antigua fortificación, íbera, romana y visigoda de la Peña se construye una fortaleza al estilo árabe, que con toda probabilidad constaría de un recinto amurallado para el refugio de tropas sin muchos añadidos defensivos, el Hinss Tuss.


Un castillo, considerado Plaza Fuerte y que fue protagonista en no pocos hechos históricos de aquel tiempo como en la rebelión del siglo IX, de los encastillados, donde el castillo de Martos se sublevó contra el Emirato y el reyezuelo de Martos acabó crucificado en Córdoba y como tiempo después Abd al-Raman III se dirigió a nuestra ciudad con su ejército.


Siglos después llegaría la Batalla de las Navas de Tolosa, donde los ejércitos cristianos arrasarían a los Almohades y de dicha batalla, surgiría el Pacto de Jaén en el que se entregaba a Fernando III El Santo, la ciudad de Martos pues este rey sabio, tenía sobrados conocimientos de que haber tomado la Fortaleza de la Peña habría sido una cuestión imposible.

La Fortaleza Inexpugnable Calatrava


Así este gran rey inició la conquista de Jaén en nuestra ciudad y la misma se convirtió en el principal bastión castellano en territorio musulmán.


Muchos y poderosos fueron los intentos de recuperar este castillo. En 1227, en 1238, en 1244, en 1325...


Igual de poderosos fueron los ejércitos que de él partieron para conquistar grandes territorios como el ejército que partió de Martos en 1236 y terminó conquistando Córdoba, antigua capital del Califato.


Debido a la importancia que cobró la ciudad, el rey la entregó a la Orden de Calatrava que la transformó en la principal Fortaleza Calatrava en Andalucía y en una de las más importantes de todo el Alto Guadalquivir.


Este bastión principal en la frontera entre Castilla y Granada fue reforzado hacia 1240 por los Caballeros de la Orden, dotando al castillo de 3 recintos fortificados.

Una muralla exterior.



Un alcázar defendido por un profundo foso.


Y una Torre del Homenaje de gran tamaño.



Al mismo tiempo, la ciudad fortificada que se encontraba asentada en la Peña creció. Por un lado, construyeron los Monjes Calatravos un Convento, con toda probabilidad, sobre los cimientos de los antiguos templos y mezquitas, y dedicaron esta iglesia a Santa Catalina. Templo este que Fernando III ordenó que no fuera destruido jamás (una lástima que no le obedecieran) .


Además construyeron uno de los primeros molinos aceiteros de nuestra localidad, junto con un molino harinero y un lagar donde se elaborarían los ricos vinos de la tierra...hoy desaparecidos.


Y por supuesto, reforzaron una Alberca y un Aljibe fundamentales para el castillo y para toda la población, ya que debido a su enorme tamaño, permitían un largo abastecimiento de agua.



Diego de Villata: es la peña de martos una sierra toda de peña viva en la qual quiso mostrar la naturaleza la fuerza de todo su poder. Desde lo baxo hasta lo alto son unos riscos y peñas tan fuertes y habidos unos con otros y por algunas partes tan tocadas y cortadas que parecen puestas por mano de artífice. su cimiento y circuito es mas de media legua, su figura es piramidal a semejanza de las pirámides de egipto y viene a rematar con un llano muy capaz y espacioso en donde esta asentada y edificada la muy inexpugnable fortaleza que dicen de la peña de martos.


La Orden de Calatrava llegó a poseer un importante territorio en nuestra provincia, que iba desde Priego de Córdoba hasta Castillo de Locubín, desde Santiago e Higuera de Calatrava a Sabiote y de Torredonjimeno a Lopera y Arjona. Gran parte de este territorio se podía vigilar desde la poderosa cima de la Peña.


La lenta pero constante retirada de la frontera granadina fue produciendo el abandono de nuestra fortaleza y con el paso del tiempo quedó deshabitada para nuestra desgracia...pero antes dos hechos fundamentales se dieron...

La Valerosa Condesa


No se sabe bien, si estos hechos fueron reales o forman parte de la leyenda pero...ya se sabe...todo castillo que se merezca llevar ese nombre, debe tener sus leyendas, debe tener su fantasma y debe tener su tesoro...


Se dice que siendo ya la Peña Calatrava y estando instaurada la Marca de Martos o el Maestrazgo de Martos que siempre tuvo los caballeros principales de Calatrava y los mas valerosos en armas por ser una de las mayores fuerzas de toda la frontera y en quien los reyes de Granada tienen puestos los ojos salio un ejercito hacia Granada.


Desconocía este ejército, que en las inmediaciones de la ciudad permanecía apostado un ejercito nazarí y  creyendo estos desguarnecida la Fortaleza de la Peña la atacaron.


Viendo las mujeres que quedaron en el Castillo y entre ellas la Condesa esposa de Don Alvar Pérez de Castro, que estaban siendo atacadas, se vistieron con los ropajes y las armas de los hombres y se dispusieron por las murallas a plena vista, para mostrar que el castillo estaba bien protegido, ganando un tiempo precioso para el regreso del ejército cristiano.

Los Carvajales y el Emplazado

Juan Alfonso y Pedro Alfonso de Carvajal, eran Monjes Calatravos. Quizás maestres, quizá comendadores o quizá ambos fueran de un oficio respectivo. Eran hombres valerosos que lucharon por el Rey Fernando IV en la guerra contra el infiel hasta que cayeron en desgracia con el mismo, al ser acusados de un asesinato cometido en Palencia, de uno de los favoritos del rey.


Acusados falsamente de aquel crimen y declarados culpables por el Rey que quería dar escarmiento ante tamaño crimen contra uno de sus caballeros, fueron condenados a ser despeñados de la Peña sin que el Rey atendiera a las protestas y súplicas que los hermanos le hacían justificando su inocencia.

Al estar los hermanos preparados ante el suplicio, emplazaron al Rey ante el tribunal divino a los treinta días de su muerte. Y así se cumplió en efecto, que Fernando IV el Emplazado murió un 7 de septiembre de 1312 día en el que expiraba el emplazamiento.


Los hermanos fueron arrojados por la pared de Mal Vecino y velados por el pueblo de Martos en la Cruz del Lloro y recibieron sepultura en la Real Parroquia de Santa Marta de Martos.

Descubriendo el Castillo-Convento Milenario:

Ascender a la Peña no es cosa fácil. El único acceso es un zigzagueante sendero, que dificulta a propósito la subida de cualquiera (más aún si es atacante) al tiempo que facilita la visión a los defensores del castillo.


Accediendo al recinto amurallado bajo la imponente imagen de la Torre Del Homenaje pasamos junto a una Torre Vigía que antaño guardaría las puertas de acceso al castillo.


Adentrándonos en la enorme explanada hoy día, solo podemos imaginar...a la espera de que algún día, (esperemos que muy pronto) sea excavada toda la zona y arroje todos los secretos que hoy guarda enterrados, como podría ser el Patio de Armas, Caballerizas, Calabozos, Almazaras, la Iglesia Conventual de Santa Catalina, Molino Harinero, el Lagar, la propia población...etc


Si nos dirigimos hacia la derecha conforme entramos, nos encontramos con las murallas y torres que protegían la Ciudadela. Torres macizas algunas, huecas otras con vistas a la Ciudad de Martos y a todo el enorme territorio que desde aquí se puede ver, llegando a localizarse desde el mismo poblaciones como Vilches, a más de 90 kilómetros de distancia.



Ofendida esta la Piedra despreciada
mortal ruina o irremediable herida,
hará su ofensor; mas, si temida,
sera refugio de salud cumplida.


Hoy toda la explanada se encuentra hermosamente poblada por Silene colorata o collejas colorás que llenan de alegría y color todo este histórico lugar.


No son las únicas habitantes estas de nuestro castillo. Junto a los espectros de antiguos habitantes árabes, de enamoradas perdidas en la noche de los tiempos, de caballeros que aún vagan vigilando las murallas y que de tanto en cuanto se dejan ver...también viven una pequeña población de Cabras Montesas junto a una pequeña pero hermosa variedad de rapaces.


En un rincón, encajadas en poderosas murallas el Aljibe y la Alberca, fundamentales para la vida en la peña y elementos más singulares de nuestro castillo. Recogían la lluvia recibida en toda la explanada con varias conducciones y en un primer momento se concentraba en la Alberca, para ir pasando hacia el Aljibe.

Construido en mampostería, estaba dividido en 4 naves con varios arcos  y bóvedas de ladrillo recubiertos de almagra roja que prolongaba la conservación del agua.


¿Ves esa unión, ves esas piedras bellas?
De aquí salió la Piedra tan preciosa
Que te enriquece y de su  autor amadas
Son sumamente piedras apreciadas.


Pero guarda este rincón otros secretos...poco más abajo de estas murallas, encontramos unas extrañas formaciones, que quizás no fueran más que meros caprichos de la naturaleza o quizás fueran algún tipo de habitáculo o cabreriza excavados cerca del castillo.


Sea como fuere, dos grandes oquedades cuadradas se encuentran en la ladera de la peña en dirección a la Cruz


La Cruz que vigila nuestra ciudad desde su atalaya en las alturas, se encuentra a medio camino entre el Arco Ventosilla, nombre que nos recuerda a una de las puertas de la ciudad baja y el Castillo.


Se encuentra en una de las laderas más empinadas y escalarla produce vértigo hasta al más aguerrido de los escaladores.

Pero no es esta la inaccesible de las aristas de la Peña.


Muy cerca se encuentra la pared de Mal Vecino. Impresionante abismo, que a algunos históricos escritores de la Villa de Martos les pareció que había sido esculpido por el hombre debido a la impresión que genera la sola visión y el asomarse al mismo.

Quizás, el nombre le venga de que los "malos vecinos" de esta cima de la Peña, los ruidosos, polémicos, escandalosos...corrían riesgo de "tener un accidente" por esta pared debido a su conducta...


Es tal la altura que aquí se encuentra, que solo existió aquí un pequeño murete para prevenir las caídas, ya que la defensa natural que proporcionaba esta pared, era más que suficiente.

Visto desde la ciudad, se pueden apreciar dos "islas" de tierra bajo esta pared, entre las rocas de Mal Vecino. Se trata del antiguo Muliar o vertedero del Castillo, donde se arrojaban todos aquellos materiales inútiles ya a la población de la roca: escombros, trastos viejos y materia orgánica en descomposición que al ser arrojada desde aquí, quedaba muy alejada y evitaba las infecciones.


Junto al Mal Vecino, encontramos un pequeño cubo de muralla "restaurado" con toda probabilidad en los años 60, como parece reza en una inscripción en el cemento, que seguro que reparado por los derrumbes o el peligro de los mismos que pudo producir hace décadas, lo que demostraría que cuando se quiere...se puede.


Y a nuestros pies toda la Villa de Martos...El Barrio de la Plaza...de la Fuente de la Villa...del Castillo bajo...la Fuente Nueva...el Llanete...el Parque...El Polígono Industrial...



Y allí a lo lejos, Torredonjimeno, Jamilena, Luque, Zuheros, las Sierras de Priego de Córdoba y la Subbética Cordobesa, Cañete de las  Torres, Porcuna, Higuera de Calatrava, Arjona, La Higuera, el Santuario de la Virgen de la  Cabeza, Baeza y un extenso etc


Y terminamos en la Torre del Homenaje y su Foso, hoy relleno de escombros.


La Torre tenía 3 plantas pero la primera se encuentra sepultada bajo los escombros de la tercera.


Debió ofrecer unas magníficas imágenes desde esta planta, de todo el Castillo y de sus alrededores, ya que esta Alcazaba se encuentra 3 metros por encima del resto de la fortificación, añadiendo aún más dificultad para llegar a la misma.


Sin duda, este artículo se podría alargar mucho más...sin duda tendré tiempo de hacerlo.

Un buen lugar para descansar de la subida a la poderosa Peña de Martos, es el Paseo del Calvario, enclavado en las laderas de la Peña y adornado con un elegante arco metálico forjado en los felices años 20 del pasado siglo, señalando que este lugar nuestra Peña siempre ha atraído a todos los marteños y marteñas, ricos y pobres, de todas las épocas hacia ella.


Y que hasta ella llegaron los más poderosos reyes de nuestro país, como fueron los Reyes Católicos o el Emperador Carlos I de España y V de Alemania, que hasta llegó a dormir en nuestra ciudad.

Algo tiene nuestra Peña, llamenlo mágico, sagrado o esotérico que nos atrae desde hace siglos.


Algo tiene, que nos obliga a actuar y dejar a nuestros hijos y nietos un legado, una historia al menos para que ellos puedan seguir contándola.

Depende de ti. SALVEMOS EL CASTILLO DE LA PEÑA DE MARTOS.