sábado, 14 de noviembre de 2015

Un paseo por el bosque perdido...Alcalá la Real


Muy de tarde en tarde, me gusta perderme.

Así es. Aunque la sensación de estar perdido en un lugar que desconozco es algo que me agobia y atemoriza desde pequeño, cada cierto tiempo me gusta salir sin mapas, sin orientación ninguna, en busca de las sorpresas que me quiera deparar un determinado camino o en la búsqueda de un determinado lugar u objeto, que no sé realmente donde se encuentra aunque si acaso, conozco vagamente su ubicación. 

La gran mayoría de las ocasiones en las que hago esto, siempre me han deparado buenos resultados. Un mirador natural, una trinchera de la guerra civil desconocida por muchos, un fósil, el encuentro con algún animal salvaje suelen ser casi siempre las recompensas de salir a ciegas al campo.


Y puesto que mis quehaceres diarios me tienen últimamente bastante ocupado, hasta el punto que ya ni puedo viajar ni escribir tanto como a mí me gustase, andaba últimamente con el mono de perderme, como tantas veces hacía antes.

Y ni corto ni perezoso, hace poco tiempo reuní las fuerzas para dirigirme una vez más a Alcalá la Real, pueblo querido y admirado por mí, para en vez de perderme por las callejuelas de esta bella población o por los pasajes históricos de su castillo, pasear por sus campos olivareros.

No lo hacía con un rumbo predeterminado. No lo hacía con un objetivo claro. Pero quería hacerlo, puesto que era algo que hacía muchos años que estaba postergando.

Unos años atrás, caía en mis manos un libro titulado Dibujos y Relatos desde la Sierra Sur que fue el principal causante de mi interés por una parte de Alcalá la Real, que no sabía si existía o era fruto de la imaginación del autor del citado libro.

El libro hablaba de un bosque de zumaques muy frecuentado en otoño, al tornar las hojas de esta planta en esta estación, al rojo intenso y ser un lugar impresionante para la fotografía. Describía unos Tajos o precipicios y un Ermitaño que los habitaba y se dedicaba a realizar esculturas con la roca de estos mismos tajos. Añadía ilustraciones de las supuestas esculturas, de las que en ningún momento aclaraba si realmente existían y mucho menos su ubicación.

Con esta escasa información, me dirigí hacia la Ciudad de la Mota.

Con pocas esperanzas de poder encontrar algo de lo que se describía en el libro, ya que ni tan siquiera el todopoderoso internet supo darme algún dato de más, encaminé mis pasos hacia el pintoresco barrio de las Cruces.


Un barrio que en demasiadas ocasiones queda apartado de la "ruta turística" de Alcalá, pero que regala multitud de miradores, de parquecillos y de rincones históricos a todo aquel que lo visita. Prácticamente escalando el cerro donde se asienta este barrio, llegué hasta la cima del mismo disfrutando de las portentosas vistas de toda Alcalá la Real y sobre todo de su poderosa Fortaleza de la Mota.


Sobre este cerro, se encuentra hoy día el Parque Periurbano de Los Llanos en lo que antaño era y en parte sigue siendo un páramo, que ofrece eso sí, unas impresionantes vistas no solo de la ciudad, sino de toda esta zona fronteriza tan importante en el pasado.

Siguiendo los senderos habilitados voy dirigiendo mis pasos hacia la Ermita de San Marcos, otro de los grandes miradores de la ciudad.

En mi camino voy cruzándome con Alcalaínos que rompen el silencio de mi paseo, al estar vareando los almendros que pululan en los cuidados huertos y que acompañan las casas encaladas de blanco de esta zona histórica.

Prosigo el paseo, sin darme cuenta de que acabo de errar mis pasos y que estoy abandonando el casco urbano y me estoy adentrando de nuevo en el secarral de la zona de Los Llanos.


Tentado a dar media vuelta, puesto que el paisaje que me rodea es bastante triste y monótono, decido finalmente continuar...esperando que el instinto que guía hoy mis pasos, me lleve hacia paisajes más amables.


Al final, me doy de bruces con un tenebroso abismo. Mi camino termina abruptamente ante un auténtico acantilado donde gigantescos bloques de roca se encuentran derrumbados a mis pies, formando un paisaje caótico.



Pareciera que mi aventura hoy será corta. Aprovecho casi a modo de despedida, para disfrutar de las vistas que ofrece esta pared de roca, ya que ante mis ojos aparece un bosque exuberante que cubre una enorme extensión de terreno.


Examinando este laberinto de paredes verticales y de rocas desgajadas, descubro un sendero que se dirige hacia las oquedades dejadas por los grandes bloques de roca, cuando se soltaron de su ubicación original.


Un bosque de cipreses crece en estas umbrías donde reina un silencio sepulcral que me preocupa y atemoriza, hasta el punto que decido dar por finalizado mi paseo, impulsado por un resorte invisible...quizás sea el instinto de nuevo...



Pero al desandar mi camino y pasar junto al abismo del precipicio, descubro un pequeño sendero que se adentra en las profundidades del bosque de zumaques. Convencido de que la distancia del mismo será corta, decido adentrarme en él.

Al momento me encuentro con los restos de una antigua vivienda, que fue construida al abrigo de estas paredes de roca y que hoy apenas si es visible al estar siendo consumida por la vegetación.



A lo lejos, se vislumbra una de las muchas aldeas que tiene Alcalá la Real,  la aldea de Charilla.

Vistas de Charilla
El sendero, parece una antigua senda utilizada por los pobladores de esta zona que han acumulado grandes cantidades de rocas a los lados de este camino para intentar mantener a raya tanta vegetación.


Allí donde estos muros faltan, el bosque se vuelve espeso, lúgubre, que pareciera querer cerrarse y envolver al incauto senderista que se atreviera a adentrarse en él. Es un lugar agobiante, que sin duda pondrá en algún aprieto a aquellos que sufran de claustrofobia. Y eso que estamos en pleno campo.



Afortunadamente el camino se acerca de tanto en cuanto a las paredes de roca y alivia un poco la sensación de agobio que por aquí se respira...o quizás sea al contrario y las altas paredes, aumenten la sensación de estar encerrado en plena naturaleza.



Al final, el bosque comienza a aclararse. Pero la sensación de agobio no termina, puesto que al mirar a las poderosas paredes de roca que nos siguen acompañando y vigilando, descubro unas extrañas formaciones...que cualquiera creería que son nidos de avispas gigantes.


Apretando el paso, planteándome por un lado si he hecho bien en adentrarme en este lugar que desconozco por completo y al tiempo, sabiendo que estoy muy lejos de la llamada civilización, me dirijo hacia el que parece, es el fin del bosque. 

Los zumaques dan paso a las encinas, un árbol mucho más conocido para mí, serenando un poco mi paso y puesto que las encinas necesitan mayor espacio para vivir, el bosque ahora parece querer convertirse en una dehesa.


Pero en mi cabeza persiste una idea. Pareciera que todo rastro del ser humano en este lugar, hubiera sido borrado o tragado por la naturaleza. Solo llego a ver restos  de antiguas construcciones, que a duras penas se mantienen en pie.


Al pasar junto a un Árbol del Amor, decido que quizás tratando de escalar las paredes que desde hace tanto rato me acompañan en mi caminar, podré atrochar en mi camino de regreso a la civilización.


Pero soy consciente de mis limitaciones para tamaña empresa. Nunca fui yo buen escalador...y sufro desde hace muchos años vértigo. Un vértigo al que siempre estoy tratando de plantar cara sin resultados por el momento.


Al final, como esperaba, descubro que no seré capaz de escalar la gran altura de los poderosos tajos y eso que incluso, he llegado a aventurarme por una de las repisas que abundan por todas estas rocas, llegando a temer por mi propia seguridad.

Pero desde este peligroso emplazamiento, vislumbro por fin los olivos. Los olivares queridos y tan habituales para un marteño como yo, que en muchas ocasiones se convierten casi en nuestra segunda casa.

Hacia ellos me dirijo prácticamente a la carrera hasta dar con mis huesos en el suelo de un traspiés.

Pero lo peor es que mi alocada carrera por el campo me ha llevado a tropezarme con lo que creo que es una figura humana acostada bajo un olivo.

Mientras que me recompongo de la caída y me levanto pidiendo disculpas descubro que efectivamente es una figura humana...de piedra....Corrijo, son dos...o tal vez una familia entera atrapada en una roca.


En ese momento, sin llegar a comprender muy bien aún donde estoy, me encuentro con un olivar mezclado con zumaques poblado de extraños seres de roca, cual duendes guardianes de este campo. Las esculturas que en un principio iba buscando sin ninguna fe de ser halladas se encuentran ante mí. El destino, olfato, instinto o lo que sea, de nuevo ha vuelto a guiar mis pasos.



Frente a mí, una figura arrodillada y maniatada me mira fijamente, inquisitivo...examinando al extraño que acaba de irrumpir en sus dominios. Y junto a ella, multitud de rocas se encuentran talladas con múltiples formas y maneras.



La propia pared de los tajos se encuentra excavada formando una pequeña cueva, adornada a su vez por nuevos grabados. En su interior apenas si hay espacio para que una persona se refugie, al tiempo que pueda leer algunos versos abandonados en esta estancia.



A la salida de la cueva, de nuevo una familia surge de la roca. Ella sujeta en sus manos a un niño pequeño, mientras que él, sujeta una poderosa vara. Quizás se trate del espíritu de alguna de las muchas generaciones que han recogido la aceituna en estos viejos olivos.



Una decena de metros más arriba, en una formidable repisa natural me encuentro con una cabra y su cria vigilando el horizonte desde las alturas. En este mismo espacio, con vistas a Alcalá, aparecen varios seres más que llenan el mirador de magia.




Un olivar cuanto menos curioso, puesto que los olivos se encuentran esparcidos entre un caos de roca y los árboles crecen entre pequeños huecos conectados unos con otros, como si el olivo fuera un animal encerrado en su cuadra y cada olivo esperase en la suya propia, a modo de submundo propio. Olivos eso sí, cuidados con esmero, donde no crece ni una mala hierba ni tampoco se acumulan las hojas que paulatinamente van perdiendo estos árboles.



Finalmente me topo con una roca transformada en silla, que me ofrece un lugar para descansar de las emociones del camino, al tiempo que me permite disfrutar de la visión de este bosque, tan especial y único.


La piedra-banco, se encuentra además muy cerca de lo que parece fue una antigua vivienda o quizás cueva, no sabría muy bien denominarlo. Una enorme roca hueca, transformada en pequeño hogar, al construirse a los lados pequeños muretes. Y es que se ve que el aprovechamiento de los espacios que ofrece la naturaleza viene de muy lejos.


Y a la salida de esta rudimentaria casa, me observa una familia que (pido disculpas) no pude fotografiar como es debido, puesto que los rayos del sol comenzaban a estar muy bajos, y la luz se fundía con las sombras que iban proyectando olivos y zumaques. 



Dispuesto ya a partir y poner fin a mi caminar, me fijo por enésima vez en la imponente figura de los tajos y en ellos descubro un impresionante mirador, construido en una de las muchas grietas que surcan estos cerros.


Un mirador excavado en la roca, que proporciona una generosa visión de muchos kilómetros a la redonda y que me ayuda a vislumbrar de nuevo, la poderosa imagen del Castillo de la Mota.


En este punto y con el sol cada vez más bajo, decido poner punto y final a mi aventura. Sin aún explicarme cómo sin quererlo y sin saberlo he logrado toparme con esta maravilla, que hace que olvide por completo, todos los temores que por el camino me han acompañado.


Eso sí, en el camino de vuelta a la cercana Alcalá la Real me esperan aún algunos colosos que siguen guardando el camino.

domingo, 27 de septiembre de 2015

En Jaén tenemos DE TODO!... y tú sin enterarte...

Llevaba tiempo planteándome seriamente hacer esta entrada en mi blog. Pero los quehaceres diarios y el tórrido periodo estival me han mantenido alejado de poder sentarme a escribir sobre mi querido Paraíso Interior.

Quizás estaba buscando una excusa que me llevase a la realización de esta entrada...y puesto que hoy tengo motivos con creces para realizara...aquí la tenéis.

Un paseo virtual por algunas de las muchas maravillas que nos podemos encontrar a lo largo y ancho de toda la provincia de Jaén. Un paseo dedicado a vosotros y vosotras, que me leéis y hacéis que este blog no solo siga vivo, sino que cada día reciba más visitas.

En este verano por primera vez se han superado las 100.000 visitas a mi blog y las mismas se han multiplicado durante el verano rozando las 10.000 en un mes. Y puesto que además ya somos más de 5.000 seguidores de Conoces Jaén en Twitter, esta entrada va dedicada a todo ello. No todos los días puede uno decir que este humilde blog está alcanzando tales cotas de popularidad.


Aún hoy mucha gente no sabe cuántas cosas le ofrece Jaén. Aún hoy mucha gente piensa que Andalucía es sol y playa, mientras que el interior...no existe en la práctica...o quizás algunos piensen que Jaén no es más que olivos salpicados de algún pueblucho y/o castillo.

Y resulta que en Jaén tenemos millones de atractivos más. En alguna ocasión lo he dicho. Mucha gente invierte grandes cantidades de tiempo y dinero en visitar "paisajes grandiosos" mientras que ignora totalmente lo que su propia tierra tiene para ofrecerle.

Hoy quiero recorrer Jaén de punta a punta para mostrar alguna de las muchas maravillas que tenemos en esta tierra milenaria. Seguro que serán muchas las cosas que quedarán en el tintero, pero espero que sirva para atraer a visitantes hacia nuestra tierra, de los muchos que me leéis desde más de 30 países repartidos por el mundo.

                           Es hora de gritarlo a los cuatro vientos:  ¡EN JAÉN TENEMOS DE TODO! 

                                                                               ¿Lo sabías?

La tumba del príncipe...de Toya

¿El valle de los reyes de Egipto? El Valle de los Reyes de Jaén


Este paraje cercano a Peal de Becerro tiene una curiosa relación con el famoso valle de los reyes egipcio que tantas sorpresas, tumbas e historias a dado a la humanidad en los últimos siglos.

Al igual que en Egipto, La Tumba Principesca de Toya se encuentra en el Valle del río homónimo y da cobijo a la cultura ancestral ibérica que se sitúa muy cercana al Desierto de Jaén del que hablaré más adelante.


Descubierta de modo accidental hace un siglo, el ajuar funerario de esta cámara sepulcral constituye uno de los grandes tesoros que los antiguos íberos dejaron en nuestra tierra.


Pero con la reciente aparición de una nueva cámara funeraria en la cercana aldea de Hornos de Peal, queda en evidencia que realmente este pequeño valle fluvial dio cobijo a una familia pudiente ibérica hace varios milenios.

No dejes de descubrir esta joya de la historia de Jaén: ¡Viaja al tiempo de los íberos!


El triángulo del Renacimiento: Úbeda, Baeza y Sabiote

El corazón de la provincia de Jaén guarda una hermosa muestra del Renacimiento jiennense donde el genial Andrés de Vandelvira dejó viva huella de su obra.


Las dos ciudades declaradas Patrimonio de la Humanidad como son Úbeda Baeza ofrecen un impresionante abanico de oportunidades para conocer nuestra historia y patrimonio.

Sus edificios, catedrales, yacimientos arqueológicos y plazas monumentales guardan toda la riqueza que atesoraron a lo largo de los siglos.


Las torres y puertas de murallas que aún se mantienen después de tantos avatares, guardan celosamente estas ciudades donde se puede pasear y disfrutar sosegadamente como antaño hicieron grandes pensadores y poetas.


Y a tiro de piedra, Sabiote. Su conjunto histórico coronado por su Castillo-Palacio, se está haciendo hueco a marchas forzadas en el turismo de la provincia y sus fiestas medievales se están volviendo populosas y multitudinarias.


Mostrando así que el pasado está más presente que nunca y que nuestra pródiga historia es valorada y envidiada por propios y extraños, haciendo que cada vez sean más las visitas a esta provincia, antaño tan olvidada y que cada día debe y merece serlo menos.


La constante recuperación de espacios, edificios históricos, jardines y miradores supone una renovación de la oferta turística y cultural de estas tres poblaciones que sin prisa pero sin pausa, no cesan en apoyar a la mayor industria del país, como es el turismo.


Úbeda, Sabiote y Baeza. Un hermoso ejemplo de conservación y puesta en valor del patrimonio.

Un triángulo de arte e historia que todo el mundo debería disfrutar al menos una vez en la vida.


El gran manantial...del Río San Juan

El agua es un bien fundamental para la vida. Todo gira en torno a ella y no es por tanto de extrañar, que aquellos lugares donde la surgencia de aguas es importante acaparen la atención de muchas personas.

Estos manantiales suelen convertirse en lugares muy frecuentados e incluso en ocasiones, se convierten en monumentos naturales. Miles de ejemplos tenemos de ello, la Fuente de los 100 caños, el manantial de Grazalema, etc. son algunos ejemplos de ellos.


Y Jaén no podía ser menos. Puesto que son muchos los ejemplos que podría poner, me quedo con uno:
El nacimiento del Río San Juan en Castillo de Locubín.

Poco más de 2 kilómetros separan este paraje del pueblo. Formado por enormes charcas donde el agua surge con fuerza del subsuelo arrastrando a los gases que se encuentran encerrados en el mismo, formando un característico burbujeo en toda la zona, que se encuentra adecuada como zona de baño y recreativa.


El agua surge aquí a temperaturas bastante bajas, haciendo que ni tan siquiera los peces se atrevan a instalarse en las mismas.

Y al comenzar su periplo, el Río San Juan crea pequeñas cascadillas y torrentes protegidos por frondosas sombras de un espeso bosque de ribera que atrae en meses de estío a gran número de bañistas.


Un oasis y un regalo, para los tórridos meses de verano entre el mar de olivos y cerezos en la Sierra Sur de Jaén.


El Castillo estelar...de Hornos de Segura

Desde hace décadas, la industria espacial está cautivando la curiosidad de millones de personas en todo el mundo. Los Cosmódromos más activos, de EE.UU, Francia o Rusia, reciben cada día a un número creciente de visitantes que quiere acercarse a la vida de los "privilegiados" que viajan al espacio.

Los museos espaciales, son un potente reclamo turístico y en Jaén tenemos uno aunque por el momento, sigue siendo desconocido para muchos:

Poco a poco, paso a paso, la provincia de Jaén, el territorio con mayor concentración de castillos de toda Europa va recuperando gran parte de sus castillos y fortalezas que adornan y en muchas ocasiones coronan los pueblos de la provincia.


Pero este proceso de restauración y de recuperación, no consiste solo en volver a dar el lustre que antaño tuvieron estos castillos para dejarlos vacíos y huecos como muestra de lo que fueron...por fortuna, también se está dedicando a volver a llenar de vida y actividad a los mismos.

El mayor y mejor ejemplo de ello, es el castillo de Hornos de Segura. Un castillo en ruinas hasta hace muy poco tiempo y que hoy se ha transformado en el Cosmolarium de Jaén, en un Centro de Interpretación del Cielo, aprovechando además el potencial de observación astronómica que tiene el Parque Natural de Cazorla, Segura y las Villas.


Este Castillo a día de hoy, se ha convertido en una cápsula espacial donde podremos acercarnos a los misterios del espacio y del firmamento, aprender curiosidades de nuestro planeta y de planetas vecinos, al tiempo que nos ponemos al día de todos los ingenios espaciales que están siendo lanzados al firmamento por las distintas Agencias Espaciales del Mundo.



Tras las Huellas de los dinosaurios...en Santisteban del Puerto

Es innegable que el atractivo y el interés que generan los antiguos habitantes de nuestro planeta, los dinosaurios, es enorme y ha cautivado a los seres humanos desde que fueron descubiertos hace siglos.

Excavaciones para recuperar los huesos fosilizados de estos gigantes han movilizado grandes masas de gente y el imaginario popular ha llevado a los dinosaurios a instalarse en nuestra vida cotidiana.

Series, documentales y películas, nos han hecho soñar con estos antiguos huéspedes de la Tierra que desaparecieron hace millones de años y aquellos lugares donde aún hoy afloran sus restos, siguen atrayendo la atención de millones de turistas.

Y en Jaén, también tenemos una pequeña porción de ese pasado y una pequeña muestra de la presencia de esos gigantes prehistóricos.


Muy cerca de Santisteban del Puerto, a unos 2 kilómetros de la población, nos encontramos con el Monumento Natural de las Huellas de Dinosaurio.

Convertido en un pequeño parque jurásico, este rincón guarda como un tesoro 24 huellas de dinosaurio provenientes del periodo Triásico.

Guardan estas huellas multitud de secretos, puesto que el dinosaurio autor de las mismas, es una especie no descubierta hasta el momento y cuyos restos son únicos en el mundo.


Unas huellas que nos hablan de una época donde esta parte de Jaén tenía un clima distinto al actual, siendo mucho más cálida y húmeda, además de estar poblada por palmeras y coníferas.


Un auténtico viaje al tiempo de los dinosaurios sin salir de casa.


El Gran Cañón de....Pitillos y la Selva Virgen...de la Sierra Sur de Jaén

Cualquiera que ponga la televisión u hojee cualquier revista, identifica casi sin esfuerzo los paisajes del Gran Cañón del Colorado. Un paisaje famoso mundialmente y que atrae millones de visitas hacia ese paisaje agreste perdido en el corazón de EE.UU.


Algo parecido ocurrirá, si contemplamos algunas imágenes de la exuberante selva amazónica tan famosa y al tiempo amenazada.

Magnífica fotografía cedida por Blas Prieto Sánchez. Bosque de Tejos
Pues bien: llama poderosamente la atención, que un paraje tan grandioso y cercano además a la Capital Jiennense sea al tiempo un desconocido total.


Hablamos del Cañón de Pitillos, un impresionante cañón fluvial excavado por el Río Quiebrajano desde hace millones de años y cuya espectacularidad y vistosidad es enorme, aunque sean pocos los visitantes avezados que hoy día recorran las profundidades de esta enorme grieta excavada por las aguas pacientemente.


Unas aguas que en su labor excavadora, labraron también todo un campo de columnas bautizadas como las "piezas de ajedrez" o la "Piedra del Palo" que forman un particular paisaje único en Jaén y en parte de Andalucía.


Pero además, este paraje se ubica en el corazón de la Sierra Sur de Jaén, una auténtica selva mediterránea cuyos bosques se mantienen vírgenes y que atesora impresionantes monumentos naturales vivos como el Quejigo del Amo o del Carbón que cuenta al menos con 500 años de vida.


Un gigantesco vergel, olvidado y desconocido por muchos, en parte para bien al quedar apartado de visitantes molestos y/o peligrosos pero que también, se encuentra amenazado por esos mismos motivos.

Magnífica Instantánea cedida por Blas Prieto.

La Ciudad Subterránea de...Alcalá la Real

En varias ciudades de Europa, se están recuperando las catacumbas y pasadizos subterráneos que con el paso de los siglos se fueron construyendo bajo los pies de sus ciudadanos.

Muchas veces forman espacios lóbregos, siniestros e inquietantes y pese a ello, el número de visitantes que son atraídos hacia ellos no deja de crecer.

Famosas son algunas regiones de Turquía, debido al hallazgo de ciudades subterráneas que sorprende al mundo o las catacumbas de París Roma que atraen a muchas revistas e investigadores especializados .


Estos lugares fueron habitados hace miles de años. Y nuestra provincia que cuenta con la presencia humana desde hace ya varios milenios tampoco tiene nada que envidiar a estas civilizaciones ocultas.

Recientemente quedó demostrado, cuando en la ciudad de Alcalá la Real comenzó a abrirse al público su "Ciudad Oculta". Se trata de todo un conjunto de cuevas y pasadizos excavados en la roca que sustenta la poderosa Fortaleza de la Mota.


Unas cuevas conocidas desde antiguo por los alcalaínos y que hoy pueden ser visitadas, adentrándose en sus secretos y multitud de historias que jalonan el interior de este cerro, deseado por todas las culturas que pusieron pie en nuestra provincia.



El Sarcófago....Paleocristiano de Martos

No me cabe duda, de que el ser humano desde tiempos inmemoriales ha intentado "prepararse" de cara al viaje al más allá. Sarcófagos los hay de todas clases y por todo el mundo.

Los hay más antiguos, primitivos, decorados...

Pero si uno empieza a concretar y además se queda circunscrito a determinado territorio, como hoy estoy haciendo con Jaén, se encuentra con tesoros únicos.


No abundan los sarcófagos como éste, identificado como sarcófago paleocristiano visigodo y aún menos en esta tierra.

Es por esto, que el Sarcófago Paleocristiano de Martos, es una de las mayores grandes joyas arqueológicas de la provincia y así se encuentra guardado en el Museo Arqueológico de Jaén.


Este pequeño monumento funerario fue hallado en Martos a finales del siglo XIX y se encontraría en el solar de una antigua Catedral visigoda. En su interior debió reposar uno de los obispos de la diócesis de Tucci y con él aparecieron numerosos vestigios del antiguo templo donde reposó.


Adornado por figuras que representan pasajes de la Biblia, constituye uno de los más importantes hallazgos arqueológicos visigodos de Jaén.


El Gran Bosque...de Cazorla, Segura y las Villas

Imposible resumir en tan poco espacio, tanto como ofrece uno de los mayores pulmones verdes de España.


Igualmente imposible sería reducirlo a una sola entrada de este blog. El gran Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y las Villas forma una de las mayores reservas naturales de todo el país.

Multitud de especies endémicas encuentran refugio en estas montañas y entre ellas, muchas especies de animales y vegetales en peligro de extinción.


La geología de esta Sierra también es espectacular y toda ella se encuentra surcada por innumerables ríos, arroyos y manantiales. En una tierra donde el agua, lamentablemente aparece como un bien escaso, no faltan multitud de charcas, cascadas y saltos que conforman impresionantes formaciones.


Los pueblos que viven al abrigo de este entorno natural, guardan un impresionante abanico de historia y arte. Castillos, iglesias y palacios adornan las siluetas de muchos pueblos que unidas a multitud de fiestas y tradiciones, atraen año tras año a miles de personas.


Sin hablar de la multitud de enclaves que se han convertido en un populoso reclamo turístico como el Castillo-Cosmolarium de Hornos de Segura, la Cerrada del Utrero, el Castillo de Segura de la Sierra, su Festival Internacional del Aire, la Cerrada del Pintor, el Nacimiento del Guadalquivir, la Ruta de Félix Rodríguez de la Fuente, El Nacimiento del Río Segura, y un larguísimo etc.


Imposible reducir tanto, en tan poco espacio. Tienes que venir.


El Desierto de...Larva

Vivimos en una tierra, donde el agua se convierte en un bien fundamental a la vez que escaso (y cada día más por nuestra culpa, pues debido a nuestra irresponsabilidad estamos provocando el cambio climático). Tanto es así, que muchas veces miramos con cierta envidia, quizás con rencor inmerecido a otros territorios parecidos al nuestro (quizás la verde Toscana Italiana) que han sido regalados con un mejor reparto de estos poderes casi divinos que son las lluvias.

Y aunque muchos no lo sepan, sin tan siquiera salir de nuestro Paraíso Interior nos encontramos con un régimen pluviométrico muy diferenciado.

Es así. Mientras que por ejemplo las áreas serranas de nuestra tierra, acumulan grandes cantidades de lluvias al toparse las nubes con sus cumbres y dejar parte de su húmeda carga en ellas y en las zonas aledañas, en las zonas "de espaldas" a estas, el número de precipitaciones se reduce enormemente.


Es el caso de Larva. Una pequeña población que se ubica y defiende desde hace siglos la Línea entre Jaén y Granada. Las escasas lluvias retenidas en numerosas ocasiones al chocarse contra el macizo de Sierra Mágina hacen que los paisajes de este pequeño pueblo se tornen esteparios, casi desérticos, formando así un paisaje único en esta provincia, casi desconocido por propios y extraños.


Un paisaje que en los últimos años comienza a captar la atención de investigadores y visitantes, puesto que ofrece multitud de oportunidades de desarrollo para esta tierra, donde queda claro...uno no deja de sorprenderse con tanto paisaje cambiante.



Los Jardines...de Jabalcuz

Si a tus oídos llegan palabras como "Jardines señoriales decimonónicos" e incluso si buscas tal palabreja en Internet, solo encontrarás referencias de lugares muy lejanos...Quizás París o los Jardines Palaciegos de Madrid...

No parece ser que en esta tierra de olivar y trigos, de labriegos y casas encaladas no hubiera lugar para tales lujos...

Y si además le incluimos la existencia de aguas termales, nuestra imaginación nos llevará a territorios aún más lejanos y exuberantes.

Y seré sincero amigo-amiga lector, aún hoy este humilde narrador de paisajes se sorprende al comprobar, cuanto desconocemos de nosotros mismos.


Todavía hoy, me sorprendo al ver que son muchos los que desconocen por completo los TESOROS de nuestro PARAÍSO INTERIOR.

No llego a comprender, que a tiro de piedra de Jaén Capital tengamos una joya como son los Jardines de Jabalcuz y los Baños de Aguas Termales homónimos y sea tan grande el desconocimiento de este histórico lugar.


Cuando he podido llevar allí a algunos amigos para darle a conocer este paraje, lo primero que te dicen es: No parece Jaén. Pero sí señores, estos jardines señoriales que hace tan solo unas décadas fueron muy frecuentados y concurridos por importantes personalidades de España, están muy cerca.

Pareciera que la modernidad, este tiempo tan mecanizado y tecnológico nos hubiera hecho olvidar la grandeza de nuestro pasado, de nuestra historia. Pareciera que en nuestro afán por borrar y olvidar lo antiguo hemos olvidado estas maravillas.


Pero aquí está, al lado de Jaén. Casi sin salir del casco urbano de la Capital, encontraremos este remanso de paz, de agua y de naturaleza a los pies de la Sierra de Jabalcuz y al que probablemente se le unirá muy pronto el Balneario de Aguas Termales, que en estos momentos se encuentra en proceso de restauración.


Jabalcuz demuestra claramente lo dicho al inicio de este periplo por Jaén...

No hace falta viajar muy lejos...Jaén, tiene mucho para sorprenderte.


El Santuario Prehistórico de...Valdecanales en Rus

De nuevo podríamos encontrar un símil en nuestra provincia con el Antiguo Egipto. Famosos, mundialmente conocidos y multitudinariamente visitados son los hipogeos del Valle de los Reyes egipcio.

Santuarios prehistóricos subterráneos, que abundan en muchas culturas de este mundo...y que en Jaén están en el más absoluto de los olvidos...

Probablemente sea uno de los Monumentos más valiosos, antiguos, amenazados y desconocidos de toda Andalucía.

Os hablo del Hipogeo de Valdecanales. Si tuviera que ubicar esta maravilla de nuestra historia, solo podría decir que está en mitad de la nada. No existe una mínima señalización, ni un mínimo hito que nos dirija hacia él. Además se encuentra comunicado en una carretera comarcal en un estado de conservación bastante deficiente y para empeorar las cosas, se encuentra incluido en la Lista Roja del Patrimonio Español en Peligro.


Sabiendo todo esto, no es de extrañar la mínima afluencia de visitantes al lugar. Aunque quizás sea, un motivo que esté protegiendo este sitio histórico. Está muy claro, si ni nosotros mismos sabemos lo que tenemos y no lo valoramos, jamás podremos llegar a protegerlo.

Y este lugar merece y requiere protección. Este Oratorio Rupestre, es un templo excavado y esculpido en la roca, que se estima fue construido entre los siglos VI y VII. Es un espacio único en el Sur de España y uno de los pocos de nuestro país. Lo sorprendente de este lugar es que, a pesar de estar enclavado en mitad del olivar, no fue "descubierto" hasta la cercana fecha de 1968...


A pesar de que su interior se encuentra bastante deteriorado,  podemos adentrarnos en esta primitiva iglesia formada por tres cuevas donde hace muchos siglos, orarían los antiguos ermitaños que vivieron en estas tierras sagradas.


Los Baños Arabes de...Jaén


El gran tesoro patrimonial de la Ciudad de Jaén.

Declarado Monumento Nacional en 1931 y Bien de Interés Cultural. Ostenta varios premios europeos por los trabajos de restauración que se llevaron a cabo en ellos durante el siglo XX.


Construido en el año 1002, aprovechando los cimientos de la antiguas edificaciones romanas de la ciudad, estuvieron en funcionamiento varios años después de que la ciudad fuera tomada por las huestes de Fernando III el Santo.

Con el paso del tiempo, terminaron transformándose en tenerías y finalmente, convertidos en escombreras, que sostenían los cimientos del Palacio de Villardompardo.

Redescubiertos en 1913, fueron recuperados lenta pero paulatinamente, hasta convertirse en un referente a nivel nacional.


Se componían de varias salas: El Vestíbulo, la Sala Fría, Sala Templada y Sala Caliente.

Se conserva parte de la decoración original, cuyas paredes estaban decoradas con pinturas rojas y los suelos con mármoles blancos.


En los techos y bóvedas, también se conservan numerosas lucernas junto a la gran cantidad de columnas que formaban un entorno mágico, que llegó a ser uno de los edificios más populosos de toda la ciudad durante la dominación árabe.

En la Actualidad, forman uno de los mejores museos visitables de toda la ciudad y son una visita obligada para todo aquel que se acerque a la Capital Mundial del Olivar.


Las Pinturas ancestrales de...Jimena

Las sierras jiennenses han sido desde hace milenios refugio de multitud de gentes y habitantes.

En tiempos de carestía, de guerra o persecución, el ser humano siempre ha vuelto la mirada hacia las montañas, seguramente guiado por un arcaico instinto perdido en lo más profundo de su mente, puesto que fue en estas montañas donde comenzaron a surgir los primeros asentamientos humanos de la provincia.


Esos asentamientos, son hoy yacimientos arqueológicos donde se acumula nuestra historia primigenia y están decorados en muchas ocasiones por pinturas rupestres.

Muy numerosos son estos yacimientos en nuestra provincia, aunque son muy pocos los conocidos por el público en general.


Probablemente, el conocido y accesible sea la Cueva de la Graja en Jimena.


Pese a que más que una cueva es un abrigo rocoso, este ancestral refugio prehistórico guarda una pequeña parte de la historia de la Sierra Mágina y es de visita obligada, gracias a su fácil acceso, a su cercanía con Jimena y a las generosas vistas que ofrece su elevado emplazamiento.


La gran Cascada....La Osera

Se trata de una de las cascadas de mayor altura de toda Andalucía. Enclavada en el término municipal de Villacarrillo, muy cercana a la pedanía de Mogón podemos encontrar este regalo de la naturaleza, que constituye una gozada para los sentidos.



Llegar hasta sus pies supone un todo un reto, puesto que el sendero que nos conduce hacia este salto guarda un importante desnivel.


Eso sí, discurrir por los caminos que nos acercan hacia la cascada, nos llevan a conocer toda una sucesión de saltos y cascadillas rodeados por un hermoso bosque, coronado por riscos donde se puede otear la presencia de numerosas rapaces.


Se encuentra protegida por la figura del Parque Natural de Cazorla, Segura y las Villas y su impresionante visión, que se incrementa en años lluviosos, atrae el interés de todos aquellos que osan acercarse hasta los pies de este regalo de la naturaleza.


La Casa Encantada de...Bélmez de la Moraleda

Posiblemente sea uno de los lugares más conocidos de toda España.

Aparte de polémicas, de investigaciones e investigadores, que constantemente van confirmando y desmintiendo la veracidad o no de este fenómeno paranormal, la realidad es que muy pocos lugares han atraído tantas miradas de España y del extranjero, como esta humilde vivienda que se encuentra en el centro del pequeño pueblo de Sierra MáginaBélmez de la Moraleda.


Un misterio que surgió hace varias décadas, en plena dictadura franquista y que desde el primer momento, fue censurado. Años después, la llegada de numerosos investigadores y periodistas que llegaron al lugar acompañados de varios medios de comunicación volvieron a resucitar el Fenómeno de las Caras de Bélmez.


Un misterio que surgió en el suelo de cemento de esta casa, a modo de rostros espectrales que aparecían y desaparecían. Posteriormente, numerosos experimentos sacaron a la luz psicofonías, extraños fenómenos e incluso, la existencia de un antiguo cementerio bajo la casa.


La verdad es, sea cual sea, que este fenómeno por mucho que pase el tiempo, no deja de atraer las miradas de miles de personas que anualmente se acercan hasta este rincón de Bélmez...en busca de respuestas.


La Torrencial Cascada de...la Cimbarra

El Paso de Despeñaperros es sin duda, de los lugares más recorridos y transitados de nuestra provincia. Podemos decir sin temor a equivocarnos, que el tránsito de personas por esta parte de la Sierra Morena jiennense se puede contar por millones de personas al año...

Lo triste de ello, es que la mayoría pasan de largo, sin llegar a conocer nuestra tierra. Ni tan siquiera, las muchas joyas que guarda el Parque Natural de Despeñaperros y esta frontera jiennense.


Y es que, a pocos kilómetros de este famoso paso se encuentra una cascada espectacular, de las mayores de España, como es la Cascada de la Cimbarra. Un Paraje Natural con una enorme riqueza geológica, vegetal e histórica, pues son muchas las pinturas rupestres que adornan este paisaje, formado por la propia cascada de 20 metros de altura, a la que se le unen varias cascadillas.


La fuerza del agua en épocas lluviosas llega a ser impresionante y buena muestra de ello es la poza que se encuentra bajo la misma. Se dice, que nunca nadie ha llegado a calcular exactamente la profundidad de la misma, aunque se estima que puede llegar a superar los 40 metros de profundidad.


Una maravilla, ignorada por muchos incautos y admirada por todo aquel que se atreve a acercarse a ella.


El Tesoro de ...Torredonjimeno

El interior del Castillo Calatravo de Torredonjimeno guarda interesantes secretos. Y es que en Jaén, también tenemos tesoros ocultos provenientes de culturas antiguas, como tantos que han sido llevados al cine.

Este Castillo, se convierte en el cofre y guardián del Tesoro Visigodo de Torredonjimeno, toda una joya de esta cultura en nuestra tierra, aunque lamentable e injustamente se encuentra dispersa por el territorio nacional.


Este tesoro fue hallado en 1926 en pleno olivar tosiriano y tras algún tiempo, comenzó a dispersarse por nuestro país, debido al desconocimiento de la procedencia e historia de las piezas.

Se trata de varias coronas votivas cuya procedencia es dudosa, ya que algunos creen que procedía de Sevilla y otros de la Sede Episcopal Visigoda de Martos


Sea como fuere, hoy podemos conocer todo sobre este tesoro que hace siglos adornó alguna iglesia visigótica, si visitamos el Castillo de Torredonjimeno y nos adentramos en la Sala del Tesoro, donde se encuentra reproducido dejando patente la riqueza arqueológica de este Paraíso Interior Jiennense.



La Batalla de...Lopera

Si uno se aventura a viajar y escoge el continente europeo, entre la gran oferta cultural, de rutas, museos, ciudades y parajes, existe un hueco bastante importante dedicado a la visita de los lugares donde se produjeron las grandes batallas y acontecimientos de la I y II Guerra Mundial.

Trincheras, barracones y tristemente también, los campos de exterminio nazis, son lugares que atraen las miradas de millones de personas de todo el mundo.

Probablemente, muchas de esas personas desconocerán, que fue en España (y no lo digo yo, si no importantes historiadores e investigadores) donde se produjo la primera batalla de la II Guerra Mundial.


No en vano, en la Guerra Española participaron directa o indirectamente muchas de las naciones que después se enfrentarían y aquí se probaron multitud de ingenios militares, como aviones, tanques y armas que posteriormente se utilizaron con gran profusión en la guerra europea.

No en vano, fueron las ciudades españolas las primeras en ser bombardeadas sistemáticamente por la aviación...y no en vano, la Guerra Española concluyó apenas 5 meses antes del inicio de la conflagración mundial.


Y pese a la importancia capital de nuestra nación en aquellos tristes años...los vestigios de la guerra civil en España, ejemplo de lo que no debe volver a ocurrir y que son todo un aula de historia abierta, están desapareciendo, cuando de encontrarse en otro lugar no cabe duda, estarían puestos en valor.


Vestigios de esa triste guerra tenemos en Jaén. Muchos de ellos, en peligro o ya irremediablemente perdidos. Aunque por fortuna también quedan excepciones, como en Lopera.

Quizás el hecho de que esta pequeña población fuera la protagonista de una de las batallas de la contienda civil haga que aquí se encuentren los mayores y mejor conservados vestigios o quizás sea, que la concienciación en la cultura de la paz y el cuidado de estos restos como un jalón más de su historia sean los causantes de que se encuentren bien cuidados.


Sea como fuere, Lopera es un lugar para descubrir una parte de la historia reciente de España, olvidada y fundamental para entender nuestra actualidad.


La Playa de...Tamujoso en Baños de la Encina

La Península Ibérica es uno de los lugares más concurridos del planeta por los turistas. Y aunque en los últimos años se están dando pasos agigantados para que el turismo se siga abriendo paso en nuestro país y la variedad y la oferta de esta industria sea cada día mayor, siendo sinceros, sabemos que el turismo de sol y playa sigue siendo uno de los pilares de esta industria que está sacando las castañas del fuego a nuestro país.

Pero claro, no todos tenemos la suerte de vivir a orillas del Atlántico o del Mediterráneo...aunque ese no es motivo para no poder disfrutar de la playa.

Y es que vivimos en la provincia con mayor número de playas interiores de toda España.


La Consejería de Salud de la Junta de Andalucía tiene autorizadas 9 playas a lo largo y ancho de la provincia: en Andújar en el embalse del Encinarejo y en el del Jándula, en Santiago Pontones en el Charco de la Cuna, en Cazorla en el Río Linarejos y Puente de las Herrerías, Villanueva del Arzobispo y su Charco de la Pringue, en Villacarrillo y su Playa de Mogón, en Siles y el Arroyo de los Molinos y en Baños de la Encina y su Playa del Tamujoso en el Embalse del Rumblar que podéis ver en las fotos que adjunto.

Y a estos, se le podrían unir multitud de lugares muy frecuentados por bañistas de media provincia y que hacen las delicias de los que vivimos junto al Mar de Olivos jiennense.


También se le pueden sumar multitud de espacios que se pueden aprovechar para realizar otras actividades acuáticas, como navegar en kayak, pescar, practicar barranquismo, o incluso buscar antiguas civilizaciones perdidas, ya que en Jaén encontramos un buen número de zonas arqueológicas, sumergidas bajo las aguas de nuestros "mares interiores".


¿Aún no queda claro que en Jaén tenemos DE TODO?


El bosque encantado de...Valdepeñas de Jaén

No hace falta salir de nuestro Paraíso Interior, para adentrarnos en lugares mágicos, capaces de cautivarnos y hacernos olvidar donde estamos.

Uno de esos lugares se encuentra oculto en el corazón de Valdepeñas de Jaén. Esta población recostada a la sombra de poderosas serranías guarda celosamente el paraje de Las Chorreras.


Sin salir del casco urbano de este municipio, nos topamos con el torrente del Río Vadillo que cruza esta localidad. Este río forma un bosque fluvial mágico, plagado de cascadas, saltos, cuevas y pasarelas, adornadas por una vegetación exuberante que forma un microclima fresco en verano y cálido en invierno, donde además se acumula la bruma, dando al lugar una atmósfera acogedora.


Los visitantes que se animan a recorrer este sendero, quedan pasmados ante la belleza del mismo que en ningún momento llega a alejarse de esta población serrana.



La Gruta de...Cuadros

Cuando el calor aprieta y mucha gente huye de tierras jiennenses en busca de las playas andaluzas e incluso en busca de otros destinos más lejanos, son muchos los que echan la vista hacia su propia tierra, sabedores de los muchos tesoros que guarda.


Uno de esos, el más impresionante y especial es la Cueva de Cuadros en Bedmar, en el Parque Natural de Sierra Mágina. Muy cerca de la Ermita de la Virgen de Cuadros, junto al mayor bosque de adelfas de Europa, nos encontramos este refugio contra el calor, excavado en la roca por la acción constante del Río Cuadros, que se alimenta en gran parte del agua que baja de las cumbres de esta serranía.


El lugar, inaccesible en invierno por el caudal de las aguas del río y sobre todo por las bajas temperaturas que traen desde las montañas, se convierte en zona de paso obligado para todos aquellos que visiten estos parajes en verano, ya que las cuevas y abrigos regados por el Río Cuadros, forman una fresca atmósfera que hace que muy pocos se resistan a adentrarse en sus entrañas, buscando las cascadas y remansos que se esconden bajo una densa vegetación.



La Base Militar Americana de...la Pandera

Sí. Quizás el hecho de que en nuestra provincia exista la presencia de una base militar americana, no sea motivo de orgullo o algo de enseñar para algunos. Pero...oye, si la propia publicidad que damos de Andalucía, ya sea a través de una cerveza o por la publicidad de la Junta de Andalucía, habla con orgullo de que en Andalucía tengamos hasta soldados ingleses...¿por qué ocultar entonces la existencia de esta antigua base de telecomunicaciones, que además está plagada de misterios y secretos?


Si no fuera porque la Vuelta Ciclista a España ha culminado alguna etapa en la cima de esta montaña, muchos quizás no la conocerían, pero la Sierra de la Pandera, constituye una de las cumbres más altas de Jaén que además, suele estar cubierta de nieve durante largas temporadas invernales.

En los años de la posguerra española, cuando el mundo se sumía en plena Guerra Fría, nuestro país comenzaba a poblarse de bases militares de EE.UU y entre ellas, se instaló una en esta sierra para que vigilase los cielos de esta parte de Europa.


Una base militar que suscitó el recelo de muchos de los visitantes de esta parte de Jaén al ser zona militar y porque era acusada por muchos como la causante de numerosos fenómenos meteorológicos tales como la formación de tormentas y los periodos de largas sequías debido a los supuestos experimentos que allí se llevaban a cabo.


Finalmente, los americanos se marcharon, dejando la base en manos del Ejército Español, el cual también se fue tiempo después, dejando la torre de comunicaciones automatizada y a la antigua base abandonada a la espera de ser transformada en un hotel rural, que sin duda, contará con una de las panorámicas más privilegiadas de toda la provincia.


El dolmen de...El cerro Calar

Templarios y culturas prehistóricas. Cuántas novelas ha podido alimentar esta simple relación de periodos históricos tan lejanos.

Pero la realidad es que en el Valle de Otíñar, a pocos kilómetros de Jaén Capital, podremos encontrar una antigua civilización perdida.

Acercándonos al pueblo abandonado de Otíñar o Santa Cristina conoceremos multitud de vestigios históricos de numerosas culturas, que sorprenden por su presencia en este entorno tan deshabitado en la actualidad.


Uno de ellos es el Dolmen del Cerro Calar, de los pocos ejemplos de cultura dolménica que tenemos en la provincia. Sin duda, forma uno de los espacios más singulares, a la par de amenazados de nuestra tierra, vestigio de la presencia prehistórica del hombre. Abunda también la presencia de petroglifos y pinturas rupestres, cercando al antiguo castillo templario que corona estos riscos.


Un castillo abandonado, como tantos en esta tierra, que se encuentra en bastante buen estado (si lo comparamos con otros castillos más conocidos de la provincia) y que quizás, esa buena conservación se deba a lo lejano y oculto de su ubicación.


El Mar Interior de...Vilches

Está claro, Jaén no tiene nada que ver con los mares interiores que existen entre Europa y Rusia, vestigios vivos de lo que hace millones de años fue el primitivo Mar Mediterráneo.

No obstante y salvando las distancias, en Jaén tenemos una tremenda concentración de zonas inundadas, que forman Mares Interiores donde la localidad norteña de Vilches se lleva la palma.


Vilches es la localidad con mayor número de costas interiores de toda España, debido a la existencia de 3 pantanos en su término municipal: El Giribaile, la Fernandina y el Guadalén.

A ello, podemos sumarle la presencia de los ríos Guadalimar, Guadalén y Guarrizas; éste último forma además un paisaje impresionante como es el Monumento Natural del Piélago.


Forma así esta población, un singular enclave marino único que puede hacer las delicias de los amantes de la pesca o de la navegación, añadiéndole además el hecho de que en sus costas, se esconden multitud de emplazamientos históricos, que hacen de la zona una de las más singulares de toda la provincia.



La mayor concentración de castillos del mundo.

Son muchos motivos que convierten a Jaén en líder a nivel nacional e incluso internacional.

Somos el mayor productor de aceite de oliva del mundo, tenemos la mayor superficie de territorio protegido bajo la figura de Parque Natural, tenemos el mayor Parque Natural del Estado y sobre todo...tenemos la mayor concentración de castillos de toda Europa.


Es una de nuestras señas de identidad. De los 97 municipios que componen la provincia, son muy pocos los que no atesoran un castillo, que en muchas ocasiones corona nuestros pueblos pero que también existen ocultos entre el caserío e incluso, perdidos entre nuestras sierras y olivares.


Sin duda, ha sido desde siempre un territorio codiciado, donde además han sucedido trascendentales batallas en las que se ha decidido el futuro de todo el país.


Para encontrar un territorio con similar número de fortificaciones medievales en el mundo, deberíamos trasladarnos hacia Palestina o Siria...y tal y como están ahora las cosas lamentablemente por aquellos territorios, no es un viaje muy recomendable.


El Paraíso Disputado que forma nuestra provincia, es un formidable tesoro patrimonial que atrae a innumerables visitantes, dispuestos a viajar en el tiempo y volver al medievo, descubriendo los castillos de diferentes periodos históricos, desde el más antiguo (el de Baños de la Encina, de los más antiguos de Europa) al de mayor dimensión o interés histórico.


Los amigos de los castillos, de las batallas y asedios épicos; en definitiva, amantes de la historia, tienen aquí una visita más que obligada, en la que conocer todos nuestros castillos se convertirá en toda una experiencia, que sin duda traerá multitud de aventuras para todos aquellos y aquellas que nos visiten.


El Paraíso Disputado te espera.


La Montaña Sagrada de...la Peña de Martos

Cuando uno habla de montañas sagradas, tiende a dejar volar su imaginación hacia países y paisajes lejanos y exóticos, a montañas escarpadas en cuya cima aguarda un templo centenario, cuando no milenario, o a montañas con civilizaciones perdidas en Dios sabe qué selva ecuatorial.

Y sin embargo, enclavada en mitad del mar de olivos de Jaén, nos encontramos la Peña de Martos, una montaña codiciada por muchos, adorada por otros tantos y señalada desde hace siglos por todas las gentes que alcanzaron a tenerla a la vista.


Una montaña en cuyas laderas se establecieron hace milenios antiguas culturas que dejaron su huella impresa en ella, al tiempo que la convirtieron en un altar místico donde primero se adoraba a los dioses de la tierra y luego fue evolucionando, siendo dedicada al culto del dios Hércules toda ella en su extensión a modo de un enorme Menhir prehistórico para tiempos después, ser dedicada a la deidad de Marte.


A sus pies se alzaron multitud de templos desde tiempos inmemoriales e incluso sus rocas nos siguen hablando hoy de aquellos ritos religiosos. Considerada inexpugnable, pocos se atrevieron a atacarla y nadie consiguió poseerla por la fuerza, haciendo que todos los moradores que en ella habitaron, trajeran a su cumbre coronada por un castillo,  multitud de tesoros que han dado pie a  leyendas que siguen cautivando a propios y extraños.



La Mesa de Salomón y sus secretos...En Arjona

Arjona, en los últimos tiempos se está convirtiendo en una parada fundamental en la visita a la provincia de Jaén. Numerosos libros, estudios y novelas e incluso programas de televisión, están poniendo sus ojos en esta población que guarda cantidad de misterios y secretos.

Un ayuntamiento decimonónico, que guarda en sus entrañas unas estancias que poco tendrían que envidiarle a la Alhambra...


Una piedra "de los deseos" colocada en pleno conjunto histórico que atrae a numerosos curiosos hacia ella, desde hace milenios...


Un castillo desaparecido, que aún oculta estancias subterráneas...

Tumbas de príncipes...Santuarios donde se veneran multitud de huesos de antiguos habitantes del pueblo, perseguidos y martirizados por sus ideas...

Criptas escondidas en pleno centro del pueblo, con paredes doradas hasta el techo, adornadas con símbolos extraños cuanto menos...Lápidas templarias con extraños mensajes encriptados...


No es de extrañar por tanto, que cada día sean más los que se acercan hacia esta población olivarera para interesarse por su historia y secretos, publicadas con trabajo y esmero por uno de los grandes hijos que ha dado este pueblo.


El Santo Reino...Tierra de Santos y Milagros

Muy pocos lugares en el mundo reciben el sobrenombre de "santos".

De hecho, sólo el Santo Reino de Jaén y Tierra Santa son conocidos con esta denominación, mostrando así la particularidad de nuestra provincia.


Una provincia codiciada por multitud de culturas y que también, lamentablemente, ha acarreado una pobreza endémica que ha durado hasta hace bien poco.

En tiempos de estrechuras y carestía, los jiennenses se han tenido que enfrentar a no pocas adversidades, tanto climáticas, como alimentarias y también sanitarias.


Pero esta tierra, no recibe por simple casualidad la calificación de "santa".

Muy numerosas han sido las apariciones marianas en territorio jiennense y pródiga ha sido también esta tierra, para la presencia de Santos Sanadores.

Se trata de personas que recibían "la gracia" de Dios y que dedicaron su vida al prójimo, ayudando y sanando a tantos como a ellos se acercaban.


Conocidos incluso fuera de nuestras fronteras son los nombres del Santo Luisico, Santo Manuel y el Santo Custodio.

Los lugares donde vivieron son hoy constantemente visitados, en recuerdo de aquellos hombres que llevaron a cabo no pocos milagros, curaciones y sanaciones, haciendo que hoy sigan siendo lugares de peregrinación las casas donde habitaron, las cuevas donde rezaban o las tumbas en las que descansan.


Pese a que aún algunas personas no creen en esta historia, la realidad es que estos santos forman parte de la historia y de la cultura de una parte muy importante de Jaén y que por mucho que pasen los años, jamás se olvidará el recuerdo de su obra.


Los patios....de Jaén

La llaman "la Córdoba de Jaén" cuando realmente, el arte de engalanar las calles, balcones, rincones y fuentes era y sigue siendo una costumbre tan de Jaén como de Córdoba que debemos potenciar y recuperar.



A las puertas del Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas, se encuentra esta hermosa Villa Medieval de Iznatoraf.

Una población que guarda todo el acento antiguo del medievo, con calles estrechas y grandiosas casonas de piedra adornadas con escudos heráldicos.


A todos estos encantos se le suma, la pasión por los vecinos y vecinas por engalanar cada rincón de esta población con cientos de macetas de todos tipos y variedades, que durante todo el año, pero especialmente en primavera, llenan de vida y color estas calles en un auténtico festival de las flores.


Las impresionantes vistas que ofrecen los miradores que se encuentran en torno a esta población, son un aliciente más para disfrutar de esta pequeña villa, tan desconocida por muchos.


El Refugio Antiaéreo de...Arjonilla

Sobradamente conocidos son los refugios antiaéreos que durante la II Guerra Mundial, se construyeron en Europa. Aún más conocidos si cabe, son los refugios de Alemania. Algunos de ellos, como los sótanos de la Cancillería del III Reich han sido protagonistas de no pocas películas, artículos, libros, documentales, publicaciones y un extenso etc.

Pero como he dicho en líneas anteriores...vestigios similares existentes en Jaén siguen durmiendo el sueño de los justos, totalmente olvidados.


Escasas y felices excepciones podemos encontrar, por ejemplo en Arjonilla. Durante nuestra incivil guerra, todas las poblaciones fronterizas con Córdoba y en parte con Granada, soportaron especialmente los rigores de la guerra y en cada una de ellas, se adaptaron y prepararon para resistir los horrores de la guerra como pudieron.


Puesto que la Guerra Civil Española, fue el primer enfrentamiento armado donde la aviación bombardeó poblaciones de forma indiscriminada, los refugios antiaéreos constituyeron uno de los elementos fundamentales.

Y sabido ya el interés que despierta este tipo de espacios y el nuevo turismo "de guerra" que está surgiendo, estos espacios subterráneos están siendo recuperados y puestos en valor, para dar a conocer una parte de nuestra historia, aún hoy por contar.




No esperes más, en Jaén encontrarás multitud de paisajes, espacios y lugares que te sorprenderán y te esperan con los brazos abiertos y sin duda, no hay mejor día para descubrir este Paraíso Interior que hoy, cuando se celebra el DÍA MUNDIAL DEL TURISMO.

Dedicado a mi futura mujer Inma Lara Exposito. Por tanto como haces por mi.