jueves, 27 de diciembre de 2012

Conociendo el pasado minero de Linares

Saludos, amigas y amigos.

El verano está en su apogeo y es esta, una época ideal para salir al campo a descubrir nuestro entorno y disfrutar de la naturaleza.

Hoy, además os invito a una ruta con historia, una Ruta Turística diferente para conocer el rico patrimonio arqueológico industrial que empieza a despertar mucho interés en la hermosa ciudad de Linares.
 


Desde hace miles de años, nuestro país y en particular nuestra comunidad, fue vista y utilizada por muchos pueblos y culturas como una colonia de la que extraer todo tipo de materias primas; ya fueran agrícolas, ganaderas (no olvidemos que estamos en Iberia = Tierra de conejos) y sobre todo minerales.


 
En el norte de la provincia de Jaén, se asentaron todas las culturas y pueblos que por aquí pasaron (cuyo máximo exponente es el yacimiento íberorromano de Cástulo) dando los primeros pasos hacia la industria minera que alcanzó su mayor esplendor en el siglo XIX con la Revolución Industrial.


 
Linares vivió su propia revolución cuando, atraídas por su floreciente industria minerometalúrgica, llegan a la ciudad gran cantidad de personas buscando una vida mejor; haciendo crecer así el entramado urbano en el que se construyen grandes avenidas y monumentos de los que se han conservado un buen número a día de hoy. 


 
En esta época, Linares alcanzó una gran importancia al conseguir que el mineral que extraían de su suelo cotizara en la Bolsa de Londres y con la apertura de delegaciones diplomáticas en FranciaAlemania o Bélgica al tiempo que el movimiento obrero arraigó con fuerza en el lugar, reivindicando derechos y mejoras laborales.

En la segunda mitad del siglo XX, la caída del uso de su mineral de plomo trajo la paulatina desaparición y abandono de las minas; pero pese a ello, visitar Linares es descubrir un entorno muy particular donde abundan las chimeneas e infraestructuras varias, en una provincia acostumbrada a la agricultura y, especialmente, al olivar.
 

 
El patrimonio minero linarense a día de hoy sigue siendo extensísimo y las rutas que lo recorren, muy extensas y variadas igualmente; así que hoy para comenzar nos vamos a la Ruta de la Fundición de la Tortilla.


 
Comenzando en el Barrio de la Zarzuela que poco a poco nos guía hacia el camino de la Tortilla, vamos adentrándonos en los olivares mientras nos topamos con un paisaje muy curioso; pues a cada paso, el horizonte se rompe con antiguas chimeneas, escombreras, cabrias, minas y fundiciones.

 
A cada paso, las señales nos anuncian que en ciertos momentos no es aconsejable abandonar el carril ya que algunos terrenos se vieron muy modificados por la mano del hombre y el riesgo de precipitarnos por alguna oquedad subterránea, real.


 
Tras disfrutar de las vistas de la enorme Fundición con su Torre de Perdigones hoy abandonados pero que muestran con su soberbia planta que fueron un lugar de importancia capital para la ciudad, seguimos con vistas a la ciudad y el olivar de fondo.


 
Varias minas hoy inundadas y convertidas en pequeños bosques salvajes aún nos esperan conforme vamos regresando a la ciudad.


 
En Linares, podremos profundizar nuestros conocimientos sobre la minería visitando la histórica Estación del Tren de Madrid y su Centro de Interpretación de la Minería, que se encuentra en el Paseo de Linarejos.


 

 
En el interior del histórico edificio, aprenderemos cómo se vivía en las profundidades de la tierra, qué utensilios se utilizaban e incluso podremos ver las máquinas que se usaban en la mina y descubrir cómo son aquellas rocas que tanta riqueza trajeron a la ciudad.

Mapa del subsuelo de Linares
 
Un viaje por el subsuelo, donde aún se esconde todo un laberinto de galerías, ya olvidadas y sumidas en la oscuridad total, que serían muy interesantes de recuperar, al menos una de ellas, y hacerla visitable.


 

 
Terminando nuestro caminar y siguiendo por el Paseo de Linarejos, una de las principales y más bellas avenidas construidas en la época minera, podremos llegar hasta el Santuario de la Virgen de Linarejos, patrona de la ciudad.

 
Aquí, pondremos punto y final sabiendo que aún quedan muchas sorpresas para descubrir en esta industriosa ciudad.

miércoles, 5 de diciembre de 2012

Entre olivares y aceite...Martos

Llegó Diciembre y como todos los años los aceituneros altivos de esta provincia, nos preparamos para recoger esas aceitunas maduras, negras y este año escasas que aguardan para convertirse en nuestro producto estrella que es el aceite de oliva.

Y cuando hablamos de aceite, hablamos de Martos que desde hace ya muchos años muestra con orgullo el título de Mayor productor de aceite de oliva del mundo, un título que posiblemente en la actualidad ya no tenga tanta vigencia con la extensión de nuevos y modernos cultivos en la región, pero que nos sigue recordando la importancia fundamental que este enorme bosque con millones de árboles tiene para nuestra ciudad.


De Martos surge un tipo de aceituna, la Picual que casi ha sido rebautizada como Aceituna Marteña. Aquí encontramos un  bosque humanizado que ocupa la mayor parte del término municipal, donde la gran mayoría de los árboles sobrepasan los dos siglos de vida.


Nuestra historia está muy ligada al olivar y aunque realmente su cultivo no comenzó a extenderse hasta los albores del Siglo XX, encontramos multitud de referencias sobre nuestra relación con el olivo. Se sabe que uno de los primeros molinos aceituneros que existieron en nuestra ciudad se construyó en la Fortaleza Inexpugnable de la Peña de Martos para abastecer a los vecinos que vivían en la cima de la peña en la Edad Media. Uno de nuestros monumentos más antiguos el Sarcófago Paleocristiano (Siglo IV) fue encontrado en 1896 en unas obras del antiguo molino del Rey... y gran parte de los edificios históricos que encontramos en el ensanche de la ciudad ( Hotelito, Palacetes de la Avenida de San Amador, Casa de los Feijoo ) fueron construidos por familias acomodadas que se establecieron atraídas por el florecimiento de la industria oleícola.



 Y qué decir del famoso y por desgracia, desaparecido Tren del Aceite...


Puesto que se acerca una de nuestras fiestas más importantes y vistosas, la Fiesta de la Aceituna, os invito hoy a una ruta turística para conocer nuestros olivares, sobre todo los más famosos y longevos de la ciudad.

Una visita obligada, será la Ruta de los Olivos Centenarios que se encuentra en el Llano de Motril a escasos 2 Kilómetros del casco urbano en dirección a Santiago de Calatrava, donde se alzan altaneros olivos con más de 500 años de historia sobre sus añejos troncones, que en años pródigos producen unas enormes cantidades de aceituna. Estos olivares guardan cantidad de historias y secretos: por ejemplo, en este mismo lugar en la guerra civil fueron cortados un buen número de ejemplares para abastecer de leña a la población y para aprovechar además la instalación de un pequeño campamento militar que controlase la carretera, ya que el frente de combate se encontraba en la cercana localidad de Porcuna.

Pero nuestra visita no se puede quedar ahí...

El llano de Motril
 Existen en nuestra ciudad raros olivos de larga vida y enorme porte que bien merecen una visita.

Olivos de la Candonga
 Entre ellos, podemos visitar los Olivos de la Candonga, que se encuentran en la carretera comarcal que une Martos con Baena en una pequeña cañada, que con cerca de 10 metros de altura y de ancho del vuelo (copa) y unos troncones enormes son capaces de producir más de 600 kilos de aceituna por ejemplar.


Enorme porte comparado con sus vecinos
  Tan espectaculares son que hace unos años fueron incluidos en el Catálogo de olivos singulares de Andalucía.



 Otro olivo excepcional es el Estacón del Chinche, a unos 2,5 Kilómetros de Martos en dirección a Alcaudete. Llama la atención su enorme tamaño ya desde la lejanía. Casi un monumento vivo formado por tres patas, cuyo porte y peso es tan grande que se han tronchado, descansando en el suelo formando un enorme espacio en su interior.

Estacón del Chinche
 Olivos estos especiales, que han atraído a muchos medios de comunicación, televisiones y naturalistas. Son unos singulares caprichos de agricultores y cortaores que los dejaron "a su aire"  hace ya muchas décadas.

 

 ( Formaba parte de estos enormes olivos la llamada Estaca Grande pero fue recientemente podada pasando a ser un añejo olivo más )

Y aparte de estos tremendos olivos aunque pasando desapercibido encontramos uno mas, muy particular cerca del cortijo de El Madroño.

Olivo del Moro con sus muretes
 El Olivo del Moro. Un olivo especial, con historia...su peana se encuentra prácticamente enclaustrada entre unos sólidos muros de mampostería de muy antigua obra... se dice que de sus raíces el constante paso de arados y tractores ha ido desenterrando restos de ánforas y monedas...


¿ Qué es realmente el Olivo del Moro ? ¿ Una extraña construcción funeraria ? ¿ Otro estrafalario capricho de agricultor ? ¿ Una excusa para hacer soñar a las muchas personas que a lo largo de los años recolectan sus aceitunas ? ¿ Un aljibe romano ?



Realmente no se sabe a ciencia cierta... Pero en este puente yo les recomiendo que todo el que tenga un rato libre para descansar, se dé un paseo por los olivares Marteños, que se dejen acoger y relajar por el murmullo del viento que mece sus ramas y que escuchen... que acentúen el oído...quién sabe cuántas historias guarden estos ancianos señores de nuestros campos...


viernes, 30 de noviembre de 2012

Alcalá la Real, un cúmulo de sensaciones.

Estamos casi en diciembre, un mes marcado en nuestra provincia de un modo muy especial. Nuestros olivares se pueblan de miles de jiennenses dispuestos a recolectar esas negras aceitunas que llevan en su interior nuestro famoso y querido Aceite de Oliva.

  Nuestras ciudades y pueblos se vuelven un continuo trasiego de idas y venidas, de remolques, tractores, etc y el aire se vuelve afrutado, aromático, perfumado por los olores de nuestras almazaras...

 Pero diciembre es también tiempo de vacaciones y de descanso, sobre todo en este año con la pobre cosecha que nos presenta y es un buen momento para desconectar y darnos un paseo para conocer mas esta provincia nuestra.


Por esto en las próximas semanas os voy a presentar varios pueblos y lugares para conocer, para que podáis si queréis, preparar una escapa. Y voy a comenzar en un lugar muy especial.

Vistas de Alcalá desde San Marcos
 Hoy os voy a hablar de Alcalá la Real.

La Abadía y antiguas callejuelas
 Pero os seré sincero. Es este pueblo tan variado, guarda tantos secretos y rincones por descubrir que sera completamente imposible resumir toda su esencia en un solo articulo. Por tanto hoy solo os voy a dar una pequeña pincelada, un aperitivo que además os servirá para pasar un magnifico día en esta impresionante ciudad.

Maqueta de la antigua Alcalá fortificada
Alcalá la Real es una ciudad para conocer. Desde muy pequeño me llamo poderosamente la atención y a pesar que han sido ya muchas las visitas que he realizado, continua sorprendiéndome gratamente cada vez que me encuentro por allí. Es un paraíso para los amantes de la fotografía, de los buenos paisajes o de todos aquellos que les gusta disfrutar del arte de lo diario, de lo cotidiano, que poco a poco se va consolidando, formando un conjunto sin igual.

La botica
Hablar de Alcalá es sin duda hablar de su poderoso Castillo Fortaleza por donde comenzáremos la visita.

Impresionante conjunto

 Ya desde lejos podremos otear su silueta. Construido sobre un enorme peñasco, que pareciera creado a propósito, el Castillo de Alcalá la Real atesora una buena porción de la historia de nuestra provincia y de nuestro país. Guarda y llave de la frontera entre los Reinos de Granada y Castilla, es una autentica reliquia del tiempo.

Torre del homenaje
  Para acceder al interior deberemos franquear un buen numero de puertas, que demuestran hasta que punto era seguro y fuerte.

Una de las muchas puertas del castillo
  Coronando el cerro, nos encontraremos con la Abadía en cuyo interior ( si visitamos en ciertos horarios ) nos espera una trabajada película donde nos contaran la historia del castillo, desde la dominación árabe, a la actualidad pasando por la invasión francesa .

Abadía

Interior de la Abadía
   Una vez concluida, podremos conocer mas sobre esta enorme construcción eclesiástica en varios paneles interactivos y incluso conoceremos a varios personajes históricos dispuestos a contarnos su historia.

Paneles explicativos
El  Abad de Alcalá
 A pocos metros, el Alcázar que a cada paso nos enseña que nada esta hecho por casualidad, donde nos mostraran un buen numero de proyecciones y donde podremos disfrutar desde lo alto de la Torre del Homenaje de unas esplendidas vistas .

Vistas de la ciudad y de la fortaleza
 Conoceremos también, pintorescos personajes que habitaron en algún momento de la historia este baluarte.

El negociador
  El castillo lleva varios años sufriendo un acertado proceso de restauración y de excavación por lo que cada visita nos depara un nuevo detalle mas. Además incluido en un ambicioso plan turístico, nos presenta una buena tarde de entretenimiento y aprendizaje.

Para mas info : http://www.tuhistoria.org/index.php/mod.puntos/mem.detalle/id.13/relmenu.501/chk.003b269f6a44da8efe461576c4ee25a6

Cuevas bajo el castillo
 Pero no vamos a detenernos aquí.

Ya hemos podido disfrutar de las increíbles vistas desde este monumental castillo. Pero ahora buscaremos el contrapunto, que se encuentra en uno de los barrios mas famosos de Alcalá. Se trata del barrio de las Cruces.

Barrio  de las Cruces
 Enfrentado por completo al cerro de la Mota, forma un conjunto de callejuelas, estrechuras, cuestas que le dan un cierto aire islámico, aunque su origen es mucho mas reciente, donde el entramado de calles impide el paso de vehículos que lo convierten en un acogedor rincón para disfrutar de las panorámicas y sensaciones que nos asaltan a cada paso...

Uno de tantos miradores
Alcalá, ciudad panorámica
 Las sorpresas están garantizadas, el disfrute de los sentidos ...asegurado.


Ermita-Mirador excavada en la roca
Y para terminar nuestra visita buscaremos otro punto de vista mas, en la Ermita de San Marcos, donde podremos descubrir una nueva estampa de esta singular ciudad y ( si el cuerpo nos pide mas ) donde se encuentra una curiosidad geológica de Alcalá.

Ermita de San Marcos
Los Tajos, enormes moles de piedra que forman tremendos precipicios, recovecos y abrigos que nos dejaran como siempre suele dejar Alcalá la Real a todos aquellos que se acercan hasta ella....

Los Tajos











Olivares desde las alturas
Con muchas ganas de volver...

Vistas desde los Tajos