Hoy os quiero mostrar un auténtico diamante escondido en el Casco Histórico de Martos, que constituye un singular vestigio de la historia, perdido entre el callejero desde hace siglos; visitamos la desaparecida Ermita de San Pedro.
Este antiguo templo que se encuentra en la calle homónima (como es habitual en esta ciudad, cuyas calles bautizadas con nombres de santos suelen indicar la existencia de antiguas ermitas: San Sebastián, Santa Bárbara, etc.), en la actualidad, a simple vista no tiene ni un solo indicador de su existencia cuando pasamos por su puerta.
Sin embargo, cruzar el umbral de la casa que la esconde es cruzar un portal del tiempo, que nos lleva a un patio donde la historia acoge cada rincón.
Esta ermita perteneció a la Parroquia de Santa Marta y lamentablemente, hoy día no existen demasiados datos sobre la misma.
Muy posiblemente, como ocurre con la mayoría de estos edificios, antes de ser ermita constituyó algún edificio anterior, posiblemente árabe o visigodo y tras la Reconquista y la división de la ciudad en parroquias, se erigió como ermita al sucesor de Jesucristo.
En su tiempo, se alzaba en el núcleo urbano principal de Martos, hasta que la ciudad empezó a crecer fuera de las murallas.
Por la información que tenemos, podemos conocer que no era una capilla muy prolífica en adornos y que estaba presidida por una hermosa talla de San Pedro.
La mayoría de los datos en cuanto a esta capilla hablan de varias restauraciones desde el siglo XVI al XIX, al tiempo que cuentan cómo tenía una espadaña con una campana grande y otra pequeña, y que la mayor le fue arrebatada para fundir una de las actuales campanas de Santa Marta.
La tradición habla de que la procesión de este santo solía ir acompañada de un gallo vivo, en referencia al pasaje bíblico del prendimiento de Jesús y la triple negación de San Pedro.
Antiquísima cruz. |
¿Que antiguas imagenes ocuparían las capillas? |
El altar mayor. |
Antiguas capillas, escondidas junto a jardineras |
Entrada al antiguo templo, aún se conserva parte de la puerta |
Sillares colocados unos sobre otros casi sin argamasa... |
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