lunes, 13 de mayo de 2013

Moclín, trincheras con mucha historia. La Ruta de la Guerra Civil

Os voy a proponer una nueva parada en esta Ruta de la Guerra Civil.


Esta vez de nuevo vamos a salir de la provincia de Jaén, pero no vamos a ir muy lejos, nos quedamos en Moclín, pueblo limítrofe de Granada donde se encuentra un enclave histórico de un gran valor.

Vistas de la Aldea de Tozar desde Moclín

Cuando se inicia la incivil guerra española, no solo quedo fragmentado el territorio del estado republicano, si no que incluso pueblos grandes y pequeños quedaron divididos en distintos bandos, como ocurrió con este pueblo de Los Montes de Granada.




En la cercana pedanía de Tozar, a escasos metros de las casas del pueblo, se crearon toda una linea de fortificación, con el objetivo de mantener las lineas del lado nacional.



Construidas con hormigón ciclópeo, encontramos toda una serie de trincheras, llamadas puestos de escuadra, donde podrían llegar a concentrarse mas de treinta hombres, junto a pozos de tirador, búnkers y nidos de ametralladoras, que forman un autentico laberinto de cemento, con vistas a la sierra y a Moclín.



Aunque los sacos terreros que se añadían a estas construcciones ya no existen aun quedan en las paredes, marcas y hendiduras, juntos a inscripciones de los constructores e incluso  marcas donde colocar las ametralladoras Hotchkis 1914 de 7mm que eran las que se solían utilizar por entonces.



Pero lo sorprendente, no es la buena conservación de estos fortines, si no que en este mismo lugar podemos encontrar vestigios históricos de épocas anteriores, como si las distintas culturas que pasaron por este lugar fueran atraídas para dejar su huella en este mismo sitio.



Resulta que pocos metros mas abajo de la linea de trincheras, nos topamos con una tumba megalítica llamada "pileta de la zorra" del calcolítico antiguo, formada por grandes rocas en cuyo interior queda un hueco que albergo quizás a algún gran señor de la zona.



A pocos metros, en un nuevo salto en el tiempo, nos encontramos con Silos de almacenamiento romanos, que fueron construidos entre el siglo II antes de Cristo y el siglo III después de Cristo, que fueron usados para abastecer de grano a una antigua ciudad romana.



Pero es que a la entrada de este lugar arqueológico, surge una necrópolis medieval, de época visigoda, formada por mas de cuarenta tumbas excavadas en la roca, dispuestas casi todas a propósito en dirección oeste-este.



Lo que significa, que un muy pocos metros, podemos encontrar muestras de muchas civilicaciones, de muy distintas épocas y de distintos usos reunidas en el mismo lugar.



Un autentico portal del tiempo que quizás aun siga aguardando otros tesoros aun ocultos.



Sin duda un lugar muy especial, para aprender mucho y recorrer miles de años sin apenas moverse del sitio.


7 comentarios:

  1. Estupendo reportaje,acercandonos un poco a nuestros antepasados,y bonitas vistas tiene esa sierra.Un saludo.

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  2. Buen reportaje, unos restos muy bien conservados.

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  3. Un espacio muy interesante ...mucha historia en muy poco terreno...

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  4. Uno de los mejores reportajes que he leido

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